El periodista Ceferino Reato, autor del libro "Salvo que me muera antes", dio detalles de cómo fue la muerte de ex presidente Néstor Kirchner.
Ceferino Reato y la muerte de Néstor: "Él se creía Superman"
El periodista Ceferino Reato suele provocar polémica con sus libros, y esta última publicación no es la excepción. Tiene que ver con "Salvo que me muera antes", que trata de explicar cómo fue la muerte de ex presidente Néstor Kirchner.
En diálogo este lunes con Te Digo Lo Que Pienso -que se emite de lunes a viernes de 6:50 a 9:00 en Radio La Red Mendoza 94.1- Reato aseguró que sus principales fuentes, para contar la historia, fueron los médicos, el funebrero y el jefe de Enfermería de la Guardia. El periodista también mencionó la cantidad de rumores sobre la muerte del expresidente, relacionada directamente al hermetismo que colocó la familia luego del hecho.
"El título está tomando de una frase que Néstor le dijo a un grupo de dirigentes oficialistas en Olivos, antes de morir. Les dijo: 'El próximo presidente soy yo... salvo que me muera antes'. Él juraba que estaba bien y que había quedado bien de la intervención con el stent. Estaba decidido a ser el candidato a presidente del oficalismo, y para eso tenía que convencer a todos de que estaba en condiciones", detalló Reato.
"Su muerte provocó sorpresa, pese que ese año había tenido dos episodios cardíacos".
Ceferino contó que para su libro "hablé con los médicos y funebreros que llevaron su cuerpo. Hay muchas versiones porque lo que hubo fue falta de información sobre lo que pasó".
"Se habla desde que lo mató el hijo hasta que no está muerto y reside en Venezuela. Pero todas estas fuentes juran que no vieron restos de balazos en su cuerpo. 14 médicos trataron de reanimarlo durante 45 minutos. Las fuentes afirman que tenía un raspón en la frente producto de que al sufrir el infarto su cabeza rozó con la mesa de luz", narró.
Reato indicó que "la primera reacción de la familia fue de sorpresa, porque él se creía Superman, y todos los demás lo veían así también".
"Durante la tarde del día de la muerte de Néstor hubo un velatorio íntimo en el chalet de los Kirchner. Ese fue a cajón abierto. Ahí participaron muchas personas de relieve provincial y nacional que viajaron a Río Gallegos. Luego surgió la curiosidad de si Cristina podía hacerse cargo del kirchnersimo y del país. Ahí se comprendió que sí", sentenció Reato.