El gobierno quiere saber cuánto saben los alumnos argentinos. Los gremios se oponen.
Alumnos del todo el país serán evaluados por el gobierno nacional
Aprender 2016 es la prueba obligatoria que se realizará el 18 de octubre(y luego en formal anual) en instituciones públicas y privadas y abarcará a alrededor de 1.400.000 estudiantes de más de 39.000 escuelas de todo el país.
Se trata de todos (carácter censal) los estudiantes que cursen 6° grado del nivel primario y 5°/6° año del nivel secundario de todo el sistema educativo nacional y una muestra de estudiantes en 3° grado del nivel primario y en 2°/3° año del nivel secundario.
En tanto, los gremios se oponen y critican varios puntos de la prueba. Desafían con no tomarla, por no haber sido consultados. El multiple choice y las asignaturas, en la mira de la pedagogía.
"Reconocemos que la evaluación es solo un recorte de una realidad mucho más compleja. Sin embargo, es necesario valorar y usar la información derivada de instancias de evaluación sobre logros de aprendizajes básicos alcanzados por los estudiantes. Solo con evidencia se podrán reorientar políticas y prácticas o decidir las mejoras alternativas en función de la mejora educativa continua", señalan en la introducción de los materiales el ministro de Educación y Deportes de la Nación, Esteban Bullrich, y la secretaria de Evaluación Educativa, Elena Duro, que se difundió en el sitio educ.ar
Pero, antes de lanzarse, Aprender ya tiene críticas por parte de los maestros.
"Es ingenuo pensar que de un año a otro se pueden mejorar resultados"
Lo que subyace es que quieren hacer un ranking de escuelas tendiente a la privatización del sistema", afirma Miguel Duhalde, secretario de Educación de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera).
La ex directora general de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Adriana Puiggrós, también llama a tener cuidado con algunos tipos de evaluaciones. "Hay que tener mucho cuidado con las evaluaciones. Hay muchísimos trabajos acerca del tema de enorme polémica. Hubo una ex ministra de (George H. W.) Bush y (Bill) Clinton que renunció diciendo que el tipo de evaluación de pregunta cerrada con temas limitados es discriminatorio. No tiene como objetivo evaluar el aprendizaje sino que sólo sirve para la regulación del mercado educativo. Como la educación es, de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), un bien transable desde 2008 está sujeta a leyes del mercado y debe regularse".
"Un importantísimo directivo del Banco Mundial fue de los primeros que vio el daño que se estaba produciendo con una evaluación con preguntas cerradas, evaluación que copian en cada país sin ningún tipo de adaptación. Se les da a los instrumentos de medición un carácter negativo: quieren aplicar la evaluación como castigo, en vez de como parte de un proceso de enseñanza. Nos expropiaron el instrumento", agrega.