Cuáles son los costos de una de las prendas más clásicas de los argentinos.
¿Por qué un jean cuesta más de 1.000 pesos en Argentina?
El ticket no miente y la billetera se abre y paga el precio que cuelga de la etiqueta, un 643 por ciento más caro de lo que la marca lo compra a su taller textil proveedor.
Así, las marcas que venden en los shoppings pagan al taller textil entre $ 144 y $ 170 por cada jean para, luego venderlo a $ 1000. El costo varía de acuerdo al “lavado” del mismo, es decir, a cuan gastado o “roto” esté, ya que ello conlleva un trabajo más detallado. “El costo total para retirar un jean en la fábrica es entre $ 144 y $ 170. Varía de acuerdo al lavado. Eso puede ir desde $ 12 a $ 70”, explica, en diálogo con Apertura.com, Ariel Schale, economista de Pro Tejer, la organización dedicada a nuclear al sector textil.
Algunas explicaciones
El precio de un jean de $ 1000 se explica desde el inicio de la cadena productiva. El costo total de fabricación es de $ 144, es decir, un 14,4 por ciento del precio final.
“El costo total para retirar un jean en la fábrica es entre $ 144 y $ 170.
Más adelante, el jean es comprado por una marca de ropa que piensa revenderlo en un shopping. Se calcula que $ 129 del precio final son de “Gastos de Desarrollo de Marca” y, $ 65, de la ganancia que tendrá la marca por la venta. Así, en este momento de la cadena productiva, $ 194 –el 19,4 por ciento- corresponde sólo al desarrollo de la marca.
Luego llega el momento de pasar la tarjeta de crédito por el Posnet, situación que Schale critica. “Estamos presos de una lógica donde el sector ve cómo se llevan nuestra plata otros actores, como el sistema financiero”, asegura. Su queja radica en que los costos financieros representan el 8 por ciento del ticket, es decir, $ 80 en un pantalón de $ 1000. A eso se suma el hecho de estar en un shopping, por lo que los “Costos comerciales y de ocupación generales” representan el 31,1 por ciento del valor del jean ($ 311 del ticket).
Su queja radica en que los costos financieros representan el 8 por ciento del ticket, es decir, $ 80 en un pantalón de $ 1.000.
Finalmente, como dice el refrán, nadie se salva de los impuestos. Su participación en el precio final es de 27 por ciento ($ 270).
Por lo tanto, ya se está hablando de un jean de $ 1000 donde, a grandes rasgos, el precio no lo hace el costo inicial de fabricación sino, por el contrario, otros factores ajenos al sector textil. “El jean se hace todo con producto básico. Hoy en día, en el mercado, salvo una campera de alta tecnología que es importada, los productos son de fabricación nacional”, afirma Schale.
El aumento de precio, según la Fundación Pro Tejer, no tiene techo, porque las marcas “se pelean para ver quién vende más caro por así sos más aspiracional como brand”.