Un chico de 11 años resucitó a sus padres intoxicados con monóxido

 Ignacio Ávila tiene 11 años, vive en Bahía Blanca, y, gracias a un curso de resucitación, salvó a sus padres de morir intoxicados por monóxido de carbono.

"Cuando vi tirada a mi madre me asusté pero llamé al 911. Les dije que estábamos los tres mal. Decaídos. Me preguntaron cosas y me dijeron todo lo que tenía que hacer. Pero yo ya lo había hecho porque lo aprendí en un curso de RCP (reanimación cardiopulmonar). Lo único que tenía que hacer era ayudarles a mis papás", relató el chico que ya es famoso en su ciudad.

Los Ávila viven en el barrio Villa Muñiz, en Bahía Blanca.

"Mi hijo nos salvó. De golpe y porrazo me mareé. Se me nublaba la vista. Yo estaba en la cocina leyendo, me levanté a calentar una pava para tomar mate y me desmayé. Mi mujer estaba acostada descansando, se levantó y luego de cayó", contó Jorge, papá de Ignacio.

Abrí las ventanas, apagué todos los calefactores y llamé al 911", explicó el chico que, aunque el también se sentía mareado, supo reaccionar a tiempo. Desde el 911 le dieron las instrucciones sobre cómo debía realizar la RCP, pero él ya las sabía, luego de hacer un curso del que le había avisado su papá.

Ignacio no dejó pasar la oportunidad para alertar sobre la importancia de tener conocimientos en primeros auxilios. "Lo podrían hacer todos (los cursos), porque así ayudarían a los que quieren".

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