Lo hizo el legislador nacional mendocino Julio Cobos. Asegura que esto pone en "altísimo peligro a miles de familias y transportistas que utilizan diariamente el corredor bioceánico".
Piden que aunque sea con peaje, el Gobierno nacional arregle la Ruta 7
El diputado nacional por Mendoza, Julio Cobos, fue crítico con el Gobierno nacional por el mal estado de la Ruta Internacional Nº7 ya que es el principal corredor bioceánico en la zona.
"Cero mantenimiento. El deterioro de nuestras rutas nacionales e internacionales llega a un punto sumamente crítico: la RN7 está totalmente destruida en el tramo Uspallata-Cristo Redentor, con el pavimento de hormigón fisurado y agrietado. Esto pone en altísimo peligro a miles de familias y transportistas que utilizan diariamente el corredor bioceánico", sentenció el ex gobernador.
Peaje
Además, señaló como salida que si no va a haber inversión del Estado que "al menos haya inversión privada a cambio de peaje pero urge rapidez para una solución".
"La ruta no da más producto del deterioro por el uso, las diferentes temperaturas, nieve y lluvias de verano. Viene la temporada alta, si no se reconstruye gran parte de los tramos de esta ruta internacional quedará totalmente destruida en breve", agregó.
Además, indicó que cuando se ejecuta una obra como un camino, si no se la mantiene periódica y adecuadamente, se acorta notablemente su vida útil: "Cuando llega a su valor residual, más caro y poco efectivo resulta su mantenimiento, por lo que procede su reconstrucción".
El legislador nacional hizo referencia al monto irrisorio en el puesto de peaje de Las Cuevas, antes de arribar al Túnel Internacional, por lo que propone que se cobre lo que corresponda para poder invertir en mantenimiento, al menos en el propio túnel internacional. "Es mejor pagar un peaje que las consecuencias de un accidente por el deterioro del camino. El problema no es solo la falta de mantenimiento, también es la falta de una visión a largo plazo. Invertir en mantenimiento periódico es mucho más barato que una reconstrucción completa, y además, salva vidas", indicó.
Miles de personas en riesgo
Por último, manifestó que no invertir en mantenimiento es "encarecer el mismo a futuro y poner en riesgo a miles de personas que esperan una ruta acorde al siglo XXI".
"La irresponsabilidad de desfinanciar esto tiene un costo altísimo. La seguridad de los vehículos que transitan y la competitividad de nuestra economía en el Paso internacional que concentra el mayor tránsito -tanto de pasajeros como de cargas- está en jaque. La infraestructura pública no es consecuencia sino causa del desarrollo", culminó.
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