El Gobierno nacional anunció un aumento de haberes y un nuevo bono para el mes próximo.
Habrá bono para jubilados en agosto
El Gobierno nacional anunció un aumento de haberes y un nuevo bono para jubilados y pensionados en agosto. La Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) ha dispuesto, a través de las Resoluciones 389 y 390/2024 publicadas este martes en el Boletín Oficial, un incremento del 4,6% para el próximo mes, basado en la fórmula de movilidad que ajusta por inflación con dos meses de rezago, utilizando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de mayo como referencia.
Con este ajuste, la jubilación mínima se elevará a $225.540,61, a lo que se sumará un bono de $70.000, alcanzando un total de $295.540. Ningún jubilado podrá percibir menos de esta cifra, lo que implica que aquellos cuyos haberes sean superiores al mínimo recibirán un bono proporcional hasta alcanzar este monto. Por su parte, la jubilación máxima llegará a $1.517.094,80, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) será de $180.363,54, y la Prestación Básica Universal (PBU) ascenderá a $103.135,11.
Además, la Anses ha confirmado los nuevos montos para las asignaciones familiares: la Asignación Universal por Hijo (AUH) será de $81.010, la AUH por Hijo con Discapacidad alcanzará $263.791, y la Asignación Familiar por Hijo será de $40.505 para el primer rango de ingresos, que incluye a aquellos grupos familiares con ingresos hasta $627.230. Sin embargo, se ha estipulado que los ingresos superiores a $1.660.759 por parte de uno de los miembros del grupo familiar excluirán a dicho grupo del cobro de asignaciones familiares, incluso si el total de sus ingresos no supera el límite máximo establecido.
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En paralelo, la Cámara de Diputados aprobó el mes pasado una iniciativa para modificar el mecanismo de actualización de haberes con el objetivo de que los jubilados recuperen lo perdido en el primer mes del año. Aunque la sesión en el Senado estaba programada para la primera semana de julio, se pospuso para agosto debido a tensiones con el Gobierno nacional por el gasto extra que implicaría el cambio. La Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) ha estimado que la modificación representaría un gasto adicional del 0,4% del PBI.
La propuesta incluye una actualización mensual de haberes basada en el último dato disponible del IPC, en lugar del rezago de dos meses actual. Además, se plantea una compensación extra del 8,1% para cubrir la diferencia entre el aumento del 12,5% otorgado en abril y la inflación del 20,6% de enero, que quedó fuera de la actualización con la fórmula vigente.
También se establece que el haber mínimo sea equivalente al 1.09 del valor de la Canasta Básica Total de un adulto. Asimismo, se prevé un adicional anual del 50% de la variación entre la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) y el IPC, con el fin de mejorar las jubilaciones en contextos de crecimiento económico y evitar que el IPC se convierta en un techo para los haberes.
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