El gobierno no homologó el pedido de aumento del 45%. Luego de una reunión con Julio Cordero, Hugo Moyano aceptó bajar el porcentaje y adecuarlo a la inflación prevista.
Hugo Moyano sacó a su hijo de la negociación y aceptó bajar el aumento
El líder del Sindicato de Camioneros, Hugo Moyano, tomó las riendas de las negociaciones en el conflicto por la no homologación de la última paritaria, desplazando a su hijo Pablo Moyano de las discusiones y, liego de una reunión con el secretario de Trabajo, Julio Cordero, aceptó trabajar en un nuevo convenio salarial por el cuatrimestre marzo-junio.
La reunión entre Moyano y Cordero tuvo lugar anoche, después de una sorprendente participación del líder sindical en una reunión de la CGT con altos funcionarios del Gobierno. Tras exponer sus argumentos y los números que sustentan el aumento, se acordó continuar las negociaciones este jueves en Trabajo, al tiempo que las cámaras empresariales también están deliberando sobre el nuevo escenario.
El acuerdo inicial propuesto por Camioneros, que contemplaba un aumento del 45% para marzo y abril, fue rechazado por el Gobierno por exceder la pauta salarial del Ministerio de Economía y por ser impugnado por cámaras empresariales del interior del país. Ante esta situación, Hugo Moyano aceptó trabajar en un nuevo acuerdo salarial por cuatro meses, ajustado a la inflación futura.
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— Agarra la Pala (@agarra_pala) April 10, 2024
En el pase de Feinmann y Pablo Rossi muestran imágenes exclusivas sobre la reunión entre el gobierno de Milei y la CGT en Casa Rosada.
"Hubo buena sintonía, mucho mejor de lo que esperaban de los dos lados" pic.twitter.com/vwLy6mjR8i
Entre las novedades de este nuevo acuerdo se encuentra la exclusión de cualquier aporte extraordinario del sector empresarial destinado a la obra social de Camioneros, uno de los puntos que generó controversia en el convenio anterior. Este cambio busca asegurar que el nuevo acuerdo sea compatible con las políticas económicas del Gobierno y evite futuros conflictos.
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El caso de Camioneros ha sido emblemático en la postura del Gobierno de no convalidar aumentos salariales que superen la inflación prevista. Ante la amenaza de medidas de fuerza por parte de Pablo Moyano, el ministro de Economía, Luis Caputo, fue contundente en su posición de no homologar un acuerdo que consideraba desproporcionado.
En la reunión con Guillermo Francos y Nicolás Posse, la CGT expresó su preocupación por la demora en la homologación de algunos acuerdos salariales, pero el Gobierno pidió paciencia y ha garantizado que se acelerará el ritmo de las homologaciones pendientes.
Reunión de los gremios con Posse y Francos
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