Siguen los movimientos de reformas a la ley ómnibus que el oficialismo empuja para que se apruebe el dictamen hoy martes 23. Mientras el escenario político va mostrando algunas certezas y riesgos en igual medida. El vino sin retenciones para exportar y las economías provinciales en crisis.
El vino sin retenciones, la contracara de la cuasimoneda
"Son dos caras de la misma moneda", resume el dicho popular para explicar situaciones que aparecen contrarias pero conforman la misma realidad.
El debate sobre la ley ómnibus, presentada oficialmente como la ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, es el centro de las miradas por lo que contiene, pero también por lo que representa. Contiene un abanico de reformas que busca la reducción del Estado en versión liberal argenta, es decir, con las urgencias permanentes que responden a las causantes y cíclicas crisis socioeconómicas de un país siempre al borde de todo.
El viernes 19 el empresario lácteo Rubén Ferrero dijo al aire del programa De #6a7 (Radio Jornada FM 91.9) un concepto que él mismo se encargó de aclarar que no era propiedad del liberalismo que profesa Javier Milei. "No se puede gastar más de lo que se recauda, porque de tanto pedir préstamos se terminará vendiendo la casa", sintetizó pragmáticamente el hombre que hace 55 años elabora leche y sus derivados en Mendoza.
Ver: Milei planea restituir Ganancias y 800 mil trabajadores volverían a tributar
Esa ecuación señalada de manera llana por el productor mendocino es la traducción del postulado presidencial: "No hay plata". Pero también es el explicado de las debilidades de las economías provinciales y regionales. En ese contexto hay que observar la tendencia de la creación de cuasimonedas surgida en La Rioja que ya aprobó la circulación en su territorio de los "chachos", papeles, bonos con respaldo incierto, con los cuales el gobernador Ricardo Quintela pretende paliar su déficit fiscal. Ocurre en la tierra del recordado Carlos Menem sostenida históricamente por los fondos coparticipables y partidas de recursos especiales de acuerdo al poder de lobby riojano en el gobierno central de turno.
Ese escenario se torna riesgoso porque ahora es en Córdoba desde donde resurge esta intención de la cuasimoneda que denota también la crisis mediterránea. Una provincia ultrarefractaria al kirchnerismo y que ha aportado votos decisorios para definir las elecciones de 2015 que llevaron a Macri a la presidencia y algo similar ocurrió en esta última elección que subió al podio a Milei.
"Es muy relevante la caída de recursos por un contexto recesivo pero sobre todo por la irresponsabilidad por lo que fue el tratamiento de Ganancias sin ninguna compensación (para las provincias y que había sido comprometida por Milei a los gobernadores y que ahora podría restituir). Lo dije oportunamente. Es mucha la pérdida de recursos para las provincias", aseguró hace unas horas, el diputado nacional por Mendoza, el radical Lisandro Nieri aludiendo a este problema emergente.
Lisandro Nieri conversa con su compañero de bancada el ex gobernador Julio Cobos.
Los colaboradores del gobernador de Córdoba Martín Llaryora, avisaron que "en caso de que el Gobierno nacional no ponga en marcha circuitos productivos, a las provincias les será imposible sostenerse si no existe un auxilio financiero ya que carecerán de fondos para hacer frente a sus obligaciones corrientes".
Retención "cero", el alivio del ministro
Veamos la otra cara. observemos a una hipotética moneda que tiene la efigie del presidente Milei acuñada con su reciente lema instituido "en defensa de la vida, la libertad y la propiedad".
Ayer, lunes 22, fue un día de distención, de una sonrisa leve para el ministro de la Producción de Mendoza, Rodolfo Vargas Arizu porque se confirmó que la vitivinicultura estaba sumada al listado de actividades productivas que no tendrían retenciones a las exportaciones.
Son 34 rubros productivos donde se encuentra la actividad agroindustrial mendocina y eso reconfortó a Vargas Arizu porque es un hombre dedicado a la producción vitivinícola que se incorporó a la política partidaria como representante del sector afectado, primero y ahora beneficiado con la revisión de la medida fiscal y recaudatoria.
Enfático. El ministro Vargas Arizu estaba convencido que habría retenciones "cero" para las exportaciones del vino.
Pero aún siendo un panorama promisorio, lo fue más para el ministro bodeguero cuando se enteró que hay un compromiso asumido por Milei y que está escrito en el proyecto. El Ejecutivo durante un año no podrá aumentar las retenciones, por lo que le da previsibilidad a las acciones comerciales fuera del país, un resorte para el vino que pugna por ganar espacios en las góndolas de los grandes centros mundiales de consumo.
