El lasherino, con una particular historia de vida, acaba de firmar con un sello multinacional. El barrio, el fútbol, los amigos y la música, las claves en la vida de esta figura de la música.
Jugaba en el Lobo y dejó el fútbol para ser músico: la historia del "Negro Tecla"
"Sábado, me voy para el baile, largo una historia que dónde pinta el after...", suena la canción de El Negro Tecla y es casi imposible no sentirse movilizado por el ritmo de este tema que es la sensación del momento.
La historia es larga y comienza en las calles de Las Heras, más precisamente en el Barrio Municipal, hacia el oeste del departamento norteño. Giuliano Rover vivió toda su vida en ese barrio de calles anchas y empinadas, como otros tantos del oeste de nuestra provincia.
Barrio de laburantes, de colectivos llenos con pibes que van a los colegios en el centro o trabajadores que viajan cada día a ganarse el pan para llevar a sus mesas. "El Negro Tecla" es el hijo del medio en una familia de clase trabajadora.
"Tengo un hermano mayor y una hermana más chica, mi hermano tiene 23 y mi hermanita, 14. Soy el hermano del medio, me llevo muy bien con ellos. Somos muy unidos", revela este músico mendocino que ha comenzado a codearse con la fama.
Como es el fenómeno del Negro Tecla
Como otros artistas surgidos en estos últimos años, Giuliano Rover se vinculó a su pasión por la música grabando en su casa y con su propia computadora. Si bien sus temas son de un tiempo atrás, hace algunos meses que comenzaron a sonar con todo y han llegado a ocupar lugares de privilegio en rankings argentinos y extranjeros.
"Hace rato que no saco un tema, pero la gente ha buscado temas míos y se han pegado unos temas viejos, pero de hace dos o tres años atrás", explica Giuliano incrédulo. "Rompe y Ahí Ahí, son los más escuchados. Ahí ahí se ha pegado hace un mes y lo saqué hace dos años. Rompe tiene un año", explica.
Una noche de música y amigos en el Parque es la ocasión ideal para escuchar su música y ver cómo ha llegado a la juventud mendocina. Una de sus canciones hasta fue parte de un meme de Chapanay City. En el video se puede ver cómo llegaban los aliens y venían escuchando El Negro Tecla.
"Me lo pasaron mis amigos. Hemos salido y sonaba en todos los autos. Entonces decían, 'El Negro Tecla' sonando en la nave", bromea Giuliano al recordar el video.
Su vida fue un mix de dos pasiones: el fútbol y la música. Hasta que llegó el momento de decidir por uno de los dos. Si bien toca el teclado desde chico, hace algunos años que empezó a "tomarse en serio la música".
"Le empecé a agarrar la mano a la música hace como 4 años atrás. Pero no era a lo que apostaba, me dedicaba al fútbol", explica. El Negro Tecla era jugador de Gimnasia y Esgrima en la primera local del Lobo.
"Hace un año fui al club les hablé y les dije que no iba a ir más porque estaba enfocado en otras cosas", cuenta. "Estaba jugando en primera de Liga Mendocina y a veces subíamos a la Primera Nacional para completar y entrenar con ellos", detalla el ahora ex futbolista.
Por su edad, tan solo 22 años, Giuliano compartió planteles con jugadores que se han asentado en la Primera Nacional del blanquinegro como Nico Romano y Tadeo Marchiori.
Su vida antes de la música
La familia de Giuliano vivió toda su vida en el Barrio Municipal de Las Heras. "Siempre viví en el mismo lugar, soy del barrio. Vivía cerca de la escuela", cuenta.
"De chiquitos éramos muy unidos con los pibes del barrio. Ahora, con lo que estoy haciendo, no tengo mucho contacto con ellos. Viajamos permanentemente, rara vez estoy en el Municipal", cuenta.
En tanto que revela que al volver al barrio no faltan quienes lo reconocen ya no como un vecino. "Donde me encuentra la gente me piden foto y demás, es lindo eso también", cuenta sonriendo.
"Cuando se organiza bien, podemos tomar una coca en la puerta como hacíamos antes. O juntarnos a lavar los autos con mis amigos", agrega. En tanto que recuerda su infancia: "si me habré jugado mis partidos en la plaza o en el polideportivo Covimcal".
En cuanto a su vida personal, El Negro Tecla cuenta que está de novio y valora mucho el aguante que ella le hace para seguir con la música. "Estoy de novio hace seis meses. Tenemos muy buena relación, me apoya muchísimo y entiende mi situación", revela.
De donde viene lo de Negro Tecla
Según revela el cantante, todo proviene de su adolescencia. "Iba a la escuela Vicente Zapata, hice primero y segundo ahí y en 3ero me cambio a la José Dávila", recuerda.
Y cuenta que "cuando entré ahí compraron un teclado para música y yo más o menos le hacía. Cuando iba a la escuela ya ni iba a estudiar, iba directamente a tocar el piano. Me iba del curso a tocar el teclado".
A raíz de esto, en la escuela se había hecho muy popular. "Entonces era el acto del 25 de mayo, el Negro Tecla iba a cantar. Todos me decían El Tecla. Yo poniéndome a buscar, ya estaba registrado El Tecla", explica.
Mientras que agrega: "Como era morochito, estaba quemado por lo que entrenaba. Así que le puse El Negro Tecla y quedó El Negro Tecla. Los primeros temas se titularon así y ya soy El Negro Tecla".
El fenómeno de la música en las redes
Así como surgieron L-Gante o Bizarrap, entre otros tantos artistas, las redes sociales cumplieron un papel fundamental en el despegue de la música de El Negro Tecla. Sin grandes estudios, por ahora, Giuliano se las arregló para que la gente se enamore de su arte.
"Por ejemplo, ‘Ahí Ahí' lo hice yo tocando el teclado. Desde mi primer tema hasta el último los hice todos yo y están grabados en el mismo estudio. No con la misma computadora porque la tuve que ir cambiando, pero sí con el mismo micrófono, los mismos auriculares", revela.
En tanto que anima a otros jóvenes que quieran hacer música. "Uno no tiene que hacer mucho para llegar lejos. Yo no tenía plata para comprarme todo lo profesional en ese momento y agarré lo primero que tenía", recuerda.
Por otro lado, el tema "Rompe" también estalló en las redes sociales. "Estuve mucho tiempo haciéndolo y cuando salió fue una locura, nunca pensé que iba a llegar a tantas reproducciones. Estoy muy contento porque hace poquito ganó un galardón Platino por la cantidad de reproducciones en Youtube", celebra.
"Nunca me imaginé que iba a ser así. Yo todavía no la vivo así, porque me mantengo como una persona normal. Trato de mantenerme como del lado del oyente", explica.
Hace pocas semanas, el músico lasherino firmó un contrato con Warner Music Argentina. La empresa lo llevó a grabar a Buenos Aires y encomendó la grabación de videoclips para sus canciones.
"Fui a Buenos Aires y el primer día me hicieron conocer a DJ Tao, a Locura Mix, conocí al Polaco. Son gente que tiene muchísimos años de carrera y uno como que los sigue viendo del lado del espectador. Recién arranqué hace un año y lo veo más del lado de un fan que de un cantante", revela.
En tanto que cuenta, "yo me la paso escuchando cumbia". Hace algunas semanas, en un posteo de Warner reveló que escuchaba "Tito y la Liga" y recibió un mensaje del cantante de la banca.
"Me habló uno de mis ídolos que escuchaba todos los días. Yo estaba re contento. Por eso subí la historia y todo, les dije a mis amigos. Siempre escuchábamos eso y que te hable esa persona agradeciéndote fue una locura", expresa El Negro Tecla entre risas.
En cuanto a su primer show, se dio casi de casualidad, "fue en el centro, había salido a bailar. El tema ‘Rompe' recién salía y me invitaron a subir. Canté solo un tema, tenía ‘Rompe' no más y atrás mío cantó Callejero Fino".
Desde entonces hasta ahora, el crecimiento fue meteórico. Su firma del contrato con Warner hace que llegue "a primera" en la música. "No llegué a primera en el fútbol, pero sí en la música. Estoy muy contento de haber firmado, fue muy loca la historia de cómo llegué ahí", revela Giuliano.
"Me brindan las mejores herramientas para llegar a los objetivos", cuenta el músico. Cuando su canción comenzó a sonar en muchas partes, Giuliano recibió varios llamados de discográficas que pretendían "fichar a este jugador libre".
"Me llamaban de muchos lados y me ofrecían muchas cosas. Nunca agarré ninguno. Pero el que me buscó de Warner insistió. Yo ni sabía que era Warner Music. Y hasta que un día me preguntó cuándo iba a andar por Buenos Aires, que me quería ver", explicó.
"Me habían llamado cinco meses antes y no les había dado ni bola", cuenta entre risas Giuliano. "Espero responderles bien, tanto a ellos que confiaron en mí como a los oyentes", aventura.
De pronto el crecimiento de El Negro Tecla se ha dado incluso fuera de la Argentina, sus canciones se escuchan en Uruguay y Paraguay. "Ya me están llamando de esos lados y hasta de Bolivia. Es muy loco, el otro día me pasaron que estaba en un top de los más escuchados de Paraguay. La verdad es que me pongo a pensar y digo, que locura", explica incrédulo.
"Tengo el Spotify de artista y me sale que se ha escuchado en más de 137 países. Voy a ver si puedo compartir esos datos y estadísticas para que los vea también la gente que me sigue", dice sorprendido.
"Mis objetivos de ahora son sacar más música. Estamos grabando videoclips porque ninguno de mis temas tiene videoclip. Así que hace poquito llegamos a Buenos Aires y grabamos videoclips de dos temas que ya salieron y uno de un tema nuevo que todavía no sale", revela y desliza un dato que va a interesarle a los fans. Se vienen temas nuevos de El Negro Tecla.
"Uno de los objetivos principales es que la gente conociera mi cara. Porque escuchaban la canción, la conocían, pero no sabían quién era yo", cuenta el músico. "Acá en Mendoza me conoce, donde he ido me han tratado de diez y hay un muy buen público", añade.
Giuliano sueña a futuro y asegura que le gustaría compartir estudio y escenario con otros artistas. "Me gustaría hacer una colaboración con DJ Tao, sacar temas con artistas pegados. Los de mi género que están pegados, tengo muy buena relación con todos. Ojalá que algún día se puedan hacer unas colaboraciones", se aventura.
Su vida en Mendoza cambió mucho y Giuliano entiende que en poco tiempo deberá establecerse en Buenos Aires. "Ahora es medio complicado porque al ser de Mendoza, cuando vamos para Buenos Aires trabajamos una semana a full. A mí me serviría vivir en Buenos Aires. Acá vas al estudio y no cae nadie porque hay pocos cantantes", explica.
En tanto que agrega, "fui para allá y nos encontrábamos en el estudio con un montón de gente, es muy bueno el tema de las conexiones. Salen las colaboraciones muy rápido".
Su pasión por el fútbol y su "casi" cambio de vida
El fútbol profesional era su primer sueño y la música era un hobby. Pero ninguno de los dos le estaban generando ingresos y por un momento, Giuliano quiso largar todo y buscar un trabajo como el de otra tanta gente.
"Siempre jugué al fútbol. Hice infantiles en la UNCuyo y recién entré en 6ta a Gimnasia y Esgrima. Hice, 6ta, 5ta, 4ta y Primera Local en el equipo del que soy hincha", cuenta. En algunos de sus videos en redes sociales se lo puede ver luciendo la camiseta de su querido Lobo.
Días atrás, ante la premiación, algunos hinchas de Gimnasia bromeaban con que, ante los logros de El Negro Tecla, el club debería considerarlos como parte de la historia del blanquinegro. "Premio Gardel suma estrella", bromeaban en redes.
Giuliano sabe que es querido y reconocido por sus compañeros de tantos años. "En el ambiente del fútbol recibí apoyo de mis compañeros", explica.
"Me dediqué a la música, pero seguía yendo a entrenar. Después salíamos todos los días, trasnochaba, falté a entrenar. Y dije ‘me pongo las pilas con uno o lo otro y vemos'. Estaba asustado cuando tomé la decisión de dejar el fútbol porque me dediqué toda la vida a eso", cuenta.
En tanto que asegura que, pese al susto, fue una buena decisión. "No me arrepiento de nada, aunque estuve asustado, tomé la decisión correcta. Y eso que no soy bueno tomando decisiones", sonríe.
Antes de lograr hacerse conocido estuvo a punto de largar todo, "estaba desesperado por buscar trabajo, no tenía un mango".
En ese debate interno, Giuliano pensó dejar tanto la música como el fútbol "Había mandado el curriculum a una ferretería para ver si me podían llamar. Me dijeron que ya me iban a llamar", cuenta.
"Ese mismo día subí el tema ‘Rompe' a las redes y explotó... esa misma noche lo subí", detalla. Días después lo llamaron de la ferretería en cuestión, pero Giuliano ya había encontrado su camino en la música. "Si no hubiera pegado Rompe, estaba trabajando en la ferretería", cuenta entre risas.
Finalmente, Giuliano se expresó sobre una pregunta difícil para cualquier hincha de Gimnasia... "¿El Mago o el Víctor?".
Sin dudar un segundo y con todo el respeto que cualquier gimnasista tiene por Víctor Legrotaglie, El Negro Tecla eligió: "El Mago, vos sabes que desafortunadamente nunca me pude sacar una foto ni nada. Nos seguimos en las redes. Tuve la suerte de verlo jugar y me hubiera encantado conocerlo en persona. Así que le quiero mandar un abrazo".
Y así, sencillo, como cualquier pibe de barrio, El Negro Tecla se despidió entre risas nerviosas como alguien que todavía no se acostumbra a las luces y las cámaras, pero que poco a poco está llegando a lugares donde ni se había animado a soñar.
Un chico de Las Heras que de pronto suena en varios países de América del Sur y sueña en grande. Y, sin perder su esencia, saludó como suele hacerlo en sus redes: "Saludote para el diario Mendoza Post. Así que ya saben, portensé bien y si se van a portar mal, invítenme".