Descubre cómo identificar y tratar la ansiedad en gatos para asegurar su bienestar y felicidad en tu hogar.
Ansiedad en gatos: causas, síntomas y tratamiento
Los gatos pueden experimentar ansiedad en su vida cotidiana debido a diversas razones, como cambios en el entorno, problemas de manejo y enfermedades. Es importante identificar los síntomas y aprender a tratarla, brindando un entorno enriquecido y considerando opciones de medicamentos en casos graves. Para esto María Besteiros, Auxiliar técnico veterinario, en el sitio Experto animal, explica cómo se puede aprender cómo calmar a un gato ansioso y mejorar su bienestar general.
¿Qué es la ansiedad en gatos y qué la causa?
La ansiedad en los gatos es una reacción de miedo exagerada ante estímulos percibidos como amenazantes, lo cual puede ser desencadenado por una variedad de factores, como cambios en el entorno, problemas de manejo, enfermedades orgánicas y más. Esta ansiedad puede manifestarse de diversas formas, ya sea de manera generalizada, territorial, relacionada con otras especies o con la convivencia en espacios cerrados. Es esencial identificar las causas subyacentes y brindar un entorno enriquecido para ayudar a aliviar y calmar la ansiedad en los gatos.
Síntomas de ansiedad en gatos
La ansiedad en los gatos puede manifestarse a través de signos clínicos tanto orgánicos como comportamentales. Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden variar en cada gato. Algunos de los signos físicos más comunes son:
Taquicardia, que es el aumento de la frecuencia cardiaca. Taquipnea o respiración acelerada. Jadeo. Heces blandas o diarrea. Vómitos. Dilatación de las pupilas y ojos muy abiertos. Orejas hacia atrás. Hipersalivación. Deglución de saliva continuamente y relamido de los labios. Temblores. Andar agazapado y tumbarse como en cuclillas sobre el pecho, dando coletazos. Maullidos agudos.
Los signos clínicos comportamentales de la ansiedad en los gatos pueden manifestarse de diferentes maneras, ya sea intensificando ciertas conductas o disminuyéndolas, lo cual puede indicar pasividad frente a un entorno percibido como amenazante o falta de estímulos adecuados. Por ejemplo:
Poco apetito o, al contrario, comer en exceso, incluso sustancias que no son alimentos. Aumento del autoacicalamiento, al punto de provocar pérdida de pelo y heridas en la piel. Este lamido no es como el de aseo, por eso el manto puede verse descuidado.Alteraciones en el sueño. Marcaje con orina, heces y rascado. Agresividad. Estado de hiperalerta. Síndrome de hiperestesia , que podemos detectar como contracciones espasmódicas en la musculatura del lomo o por la persecución de la cola. Letargo, el gato no juega, no se interesa por nada y casi no se mueve de su escondite.
¿Cómo tratar la ansiedad en gatos?
Ante la presencia de los mencionados signos clínicos, es crucial consultar con un veterinario para obtener un diagnóstico preciso y descartar otras patologías. Identificar la causa subyacente es fundamental para dirigir el tratamiento adecuado. Esto implica implementar medidas de manejo y modificaciones en el entorno del gato para reducir el estrés, evitando los desencadenantes identificados. Los etólogos o expertos en conducta felina son los profesionales adecuados para brindar ayuda en este proceso.
Resulta fundamental: El enriquecimiento ambiental, la distribución adecuada de elementos como rascadores, estanterías y juguetes interactivos, así como una atención dedicada y respetuosa hacia el gato, son formas efectivas de ofrecer estimulación y reducir la ansiedad. Además, se pueden considerar el uso de feromonas sintéticas y alimentos específicos con propiedades ansiolíticas o beneficiosas para problemas cutáneos.
Medicamentos para la ansiedad en gatos
En casos graves de ansiedad en gatos, un veterinario puede recetar medicamentos como benzodiacepinas, antidepresivos tricíclicos o fluoxetina para ayudar en la relajación mientras se implementan medidas de manejo. Es importante tener en cuenta los posibles efectos secundarios y la complejidad de administrarlos a un gato ansioso durante el tiempo necesario. Estos medicamentos no son una solución definitiva, sino una ayuda temporal en combinación con otras medidas de manejo.
¿Cómo calmar a un gato con ansiedad?
Si has adoptado un gato con ansiedad, es importante dejarlo tranquilo hasta que se relaje, proporcionándole todo lo que necesita en una habitación separada y evitando acercamientos que puedan empeorar la situación. Introduce los elementos de manera suave y sin ruidos fuertes, evita que otros animales accedan y mantén una presencia calmada para que se sienta seguro. Si ya está diagnosticado, sigue el tratamiento pautado por los profesionales para mejorar su estado gradualmente.
Con el conocimiento adecuado y medidas adecuadas, es posible ayudar a tu gato a vivir una vida más tranquila y feliz. Identificar las causas, enriquecer su entorno y trabajar con profesionales de la salud animal son pasos esenciales. Recuerda que cada gato es único, y un enfoque individualizado es clave para aliviar la ansiedad y mejorar su calidad de vida.
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