Fracasaron las negociaciones y los especialistas confirmaron la medida. Ya no aceptarán más prepagas ni obras sociales.
No hubo acuerdo: los médicos cobrarán $6.000 la consulta
Las negociaciones de los médicos especialistas de Mendoza con las prepagas y obras sociales fracasaron. Por eso, este viernes, los médicos de unas 20 especialidades dejarán de recibirlas para el cobro de su trabajo. En otras palabras, los afiliados de las empresas de medicina prepaga y obras sociales deberán empezar a pagar una consulta de $6.000 -y de $8.000 para psiquiatría-.
Los médicos lo confirmaron este jueves, el último día de agosto. Ya habían avisado con tres semanas de anticipación de que a partir de septiembre empezarían a dejar de aceptar esta forma de pago. Sus reclamos apuntan a retrasos de muchos meses en los pagos y actualizaciones insuficientes en el valor de la consulta.
Representantes de 19 asociaciones de especialistas médicos enviaron la confirmación de la medida este jueves. "Tras más de un mes de búsqueda de soluciones, lamentablemente no hemos logrado establecer una negociación fructífera con prepagas y obras sociales a las que solicitamos el valor de la consulta ética mínima de $6.000", afirmaron en un comunicado, el cual leyeron durante una conferencia de prensa brindada en la sede de la OBUM (Obstetras Unidos de Mendoza).
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Por eso, desde el viernes 1 de septiembre "no se recibirán, momentáneamente, obras sociales ni prepagas, hasta llegar a un acuerdo en todos los centros médicos y hospitales privados de la provincia", dice el escrito.
El comunicado aclara que siguen abiertos al diálogo con financiadores y obras sociales. "Los retrasos en los pagos y la falta de actualizaciones acordes a los niveles inflacionarios de los últimos meses no nos dejan otra opción", aseguran.
Cuál es el reclamo de los médicos
Según informaron los médicos, cobran unos $2.500 por consulta en promedio. Las obras sociales y prepagas se demoran tres meses en liquidar estas sumas, por lo que cuando llegan a sus bolsillos ya están licuadas por la inflación.
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La delicada situación de la salud privada ha empeorado en los últimos días. Por un lado, desde hace varios años que cada vez más médicos deciden dejar de trabajar con prepagas. Otros lo hacen pero cobran copagos que no están previstos por las empresas. Ahora, en Mendoza la situación ha alcanzado un punto de no retorno con la firme decisión de dejar de aceptar esta modalidad de pago de las consultas.
A lo previo hay que agregar que el fin de semana el Gobierno nacional anunció el congelamiento por tres meses de las cuotas de prepagas. Esto, apuntan las empresas, profundiza el desfinanciamiento y agrava la situación de la salud privada.
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Para sumar al lío en el que está sumido el sector, este jueves las prepagas comunicaron un aumento para octubre, mes en el que supuestamente no iba a haber subas en la cuota por decreto. Sucede que el Gobierno nacional no publicó un decreto oficializando lo que anunció, y como las prepagas deben comunicar con un mes de anticipación los aumentos, la notificación les llegó por mail a los afiliados.