Un tercer aeródromo ruso se incendió este martes por una embestida aérea.
Ucrania expuso las defensas rusas en un ataque con drones
Un tercer aeródromo ruso se incendió este martes por un ataque con drones, un día después de que Ucrania demostrara una aparente nueva capacidad para penetrar cientos de kilómetros en el espacio aéreo de su vecino con ataques contra dos aviones.
Funcionarios de la ciudad rusa de Kursk, ubicada más cerca de Ucrania, publicaron imágenes de humo negro sobre un aeródromo en las primeras horas de la mañana de este martes después del último ataque.
El gobernador dijo que un tanque de almacenamiento de petróleo había sido incendiado pero no hubo víctimas.
Se produjo un día después de que Rusia confirmara que había sido atacado por lo que dijo que eran drones de la era soviética, en la base aérea de Engels, hogar de la flota de bombarderos estratégicos gigantes de Rusia. Pero también en Ryazan, a solo unas horas en automóvil de Moscú.
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Kiev no se atribuyó directamente la responsabilidad pero lo celebró, en tanto que opinó del asunto el Ministerio de Defensa británico cuando remarcó: "Si Rusia evalúa que los incidentes fueron ataques deliberados, probablemente los considerará como algunas de las fallas estratégicamente más significativas en la protección de la fuerza desde su invasión de Ucrania.
El Ministerio de Defensa de Rusia informó que tres miembros del servicio murieron en el ataque en Ryazan, acto que caracterizó como terrorismo con el objetivo de inutilizar sus aviones de largo alcance.
Alerta en Rusia
Los comentaristas rusos advirtieron en las redes sociales que si Ucrania pudiera atacar tan adentro de Rusia, también podría atacar a Moscú. "La capacidad de las fuerzas armadas de Ucrania para alcanzar objetivos militares en las profundidades del territorio de la Federación Rusa tiene un significado muy simbólico e importante", escribió el analista militar ucraniano Serhiy Zgurets en el sitio web Espreso TV.
Los enormes bombarderos Tupolev de largo alcance que Rusia estaciona en la base aérea de Engels son una parte importante de su arsenal nuclear estratégico, similar a los B-52 desplegados por Estados Unidos durante la Guerra Fría.
Rusia los utilizó en su campaña desde octubre para destruir la red energética de Ucrania con oleadas casi semanales de ataques con misiles. La base de Engels, cerca de la ciudad de Saratov, está al menos a 600 km (372 millas) del territorio ucraniano más cercano.
Rusia respondió a los ataques del lunes con lo que llamó un "ataque masivo al sistema de control militar de Ucrania".
Los ataques con misiles en Ucrania destruyeron hogares y cortaron el suministro eléctrico, pero el impacto pareció ser menos severo que los bombardeos del mes pasado que sumieron a millones de ucranianos en la oscuridad y el frío.