Muchas personar reportaron que en el fuerte temblor de 5.4 de magnitud que se sintió en casi toda la provincia se escuchó un fuerte estruendo. La explicación del fenómeno.
Por qué fue tan sonoro el sismo de este sábado en Mendoza
Este sábado un fuerte sismo se percibió en casi toda la provincia de Mendoza. Ocurrió a las 9.12 y según el Instituto Nacional de Prevensión Sísmica (Inpres), fue de una magnitud de 5.4. Además, el movimiento telúrico fue a unos 22 kilómetros de profundidad con epicentro a 66 kilómetros al Sur de la Ciudad de Mendoza, entre los departamentos de Tupungato y Tunuyán. Pero además del "sacudón", muchos reportaron un fuerte sonido que se escuchó. Pero, ¿por qué ocurre esto?
A veces parece ser un camión o un colectivo de gran magnitud, pero ese estruendo que se escucha segundos antes del movimiento de la tierra responde al sonido que se produce tras la fractura de la corteza terrestre.
Esto es el resultado del choque entre las rocas que se desarrolla cada vez que ocurre un temblor, independientemente de su magnitud.
Ver: Fuerte sismo en Mendoza en la mañana de este sábado
Desde el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) recopilaron una serie de registros de los movimientos de tierra y sus frecuencias para transformarla en sonido.
La agencia logró capturar el estruendo en algunos movimientos de tierra y, al compararlos, concluyó que la onda acústica responde similar a una especie de explosión que ocurre en lo profundo de la tierra.
Y cada vez que ocurre el sismo la onda acústica puede ser distinta. Lo que sí se sabe es que es normal que se produzca ese estruendo y que se perciba segundos antes del temblor, porque la onda acústica viaja más rápido que la onda sísmica, detallan desde USGS.
Ver: Alerta en la Selección: Lionel Messi no jugará este domingo en el PSG
Con el sismo se produce una liberación de energía y una fractura en la tierra que se escucha de manera abrupta. Además, en su sitio detallan que este sonido es muy común en lugares cercanos a donde se genera un terremoto y ocurre en pocas fracciones de segundos. Además, la profundidad tiene mucho que ver también ya que esté último sismo fue a 22 kilómetros de profundidad.
Por último, algunas de estas frecuencias se perciben y otras no, algunas son audibles solo por los animales.