Con estos tips podés acelerar la curación de tu mascota.
Cómo curar con remedios caseros la sarna de los perros
La sarna es una de las enfermedades de la piel más comunes en perros y gatos, y puede afectar las zonas localizadas del cuerpo o a los oídos. Los parásitos que la provocan son los ácaros y se clasifican en función de la zona afectada y de la especie a la que pertenezca.
Para complementar el tratamiento médico de tu perro diagnosticado de sarna y acelerar el proceso de curación es recomendable conocer algunos remedios naturales y caseros.
Tres tipos diferentes de sarna
Sarna sarcóptica: Es el tipo de sarna más común y se contrae con el contacto de otro perro que esté infectado, además puede traspasarse a las personas humanas.
Sarna demodécica: A diferencia de las otras, este tipo de sarna es de origen hereditario, la madre infectada se la pasa a sus crías de manera natural, pero no es contagiosa puede tratarse con indicaciones del veterinario.
Sarna otodéctica: En este caso afecta de manera exclusiva a la zona de las orejas tanto de los perros como de los gatos. La manera de contagio es al estar en contacto con otro animal que padezca de este enfermedad.
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Remedios caseros para curar la sarna
Jabón con ph neutro
Los jabones para la piel de los perros que aconsejan los expertos son aquellos con ph neutro, es decir de propiedades antisépticas y antibacterianas, sin aromatizantes ni componentes tóxicos para ellos. No se debe utilizar cepillo para bañarlo, simplemente hay que mojarlo con agua tibia y frotar el jabón suavemente por las zonas más afectadas. Se recomiendo hace este trabajo una vez a la semana hasta que esté completamente curado.
Aceites vegetales
Lo más recomendables es utilizar aceite de oliva. Debes aplicar unas gotas en las zonas afectadas para debilitar los nidos de los ácaros. De esta forma, además, hidratará la piel reseca del perro por la infección.
Hierbas y plantas medicinales
Las más efectivas para combatir la sarna son el Neem, Cymbopogon y el Niaoli por sus propiedades antisépticas, regenerativas de la piel y antibacterianas. Una forma de aplicarlas es mezclándolas, de manera individual, con aceite de almendras o de oliva y aplicando algunas gotas del preparado en la zona afectada.
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