La verdadera razón del enojo del PRO con Facundo Manes

Cuentan que el senador nacional más joven en la historia de la Cámara Alta, el chubutense Ignacio "Nacho" Torres de Juntos por el Cambio, envió días atrás al Interbloque de Senadores que preside Alfredo Cornejo, a su bloque del PRO, a la conducción del partido que encabeza Patricia Bullrich y a la mesa nacional de JxC, un audio furibundo. Allí, advertía de las cercanías del científico y ascendente estrella radical Facundo Manes con algunos sectores del Frente de Todos, a través del Instituto de Neurología Cognitiva INECO, que presta servicios a instituciones, agencias y gobiernos.

El audio del senador Torres, a propósito de la enorme foto política de Facundo Manes sentado en soledad en la asamblea legislativa para seguir el discurso de Alberto cuando ya los "halcones" del PRO se habían retirado, habría provocado repercusiones internas en el PRO, y rápidos movimientos para calmar las aguas dentro del principal espacio opositor y no meter más ruido con sus socios radicales.

El enojo del senador Torres, que habló con varios de los dirigentes de primera línea del PRO, tiene que ver con las últimas elecciones en la provincia del Chubut. El joven legislador arrasó en la PASO de Juntos por el Cambio, y luego repitió el triunfo con mucha contundencia en las generales, donde derrotó al Frente de Todos, y al oficialista provincial filoperonista Chubut al Frente. Lo que Torres había objetado es la relación de cooperación entre Facundo Manes, y el intendente más importante de Chubut, el peronista Juan Pablo Luque (44), que conduce los destinos de una ciudad rica: Comodoro Rivadavia. Luque reúne una condición rara en la política de hoy. Es persona de confianza tanto de la Casa Rosada y el "albertismo", como del Instituto Patria, y una de las principales cartas del peronismo patagónico para 2023. Sucede que en marzo del año pasado, Luque y Manes firmaron un convenio entre el INECO y la agencia Comodoro Conocimiento. En ese momento del año, las internas políticas de Chubut estaban "prendidas fuego". Y la foto de Luque con Manes cayó mal en la UCR y en el PRO de aquella provincia. Aunque el intendente de Comodoro es un peronista "transversal", de fuerte perfil industrialista, productivo, y con una agenda atenta a los cambios.

Y la foto que generó los enojos, fue con el intendente justicialista Luque:

La semana pasada, cuando Manes se quedó a presenciar el discurso completo de Alberto a pesar de que los legisladores del PRO se habían levantado, hubo muchos pases de factura entre los aliados. El científico explicó su postura en un posteo en la red social Twitter: "Me preguntan por qué me quedé. Ya probamos con no escucharnos y así estamos. No coincido con muchas cosas del discurso, pero si no lo escucho no puedo opinar. Más EMPATÍA y menos grieta = más desarrollo inclusivo. La Argentina del futuro será de los que nos quedamos" escribió. Torres, recordando las fotos en la Patagonia, dijo en una entrevista en la ciudad de Esquel que "Manes habla mucho del cerebro, pero no lo usa..." y varios salieron a cruzarlo. Uno de ellos, es el dirigente radical Damián Biss, intendente de Rawson, la capital patagónica que fue arrasada a fuego y piedras en diciembre del año pasado, cuando aprobaron una ley minera que fue derogada poco después. Escribió Biss: "La democracia muchas veces es escuchar para poder discutir y consensuar. Agraviar e insultar a quien piensa diferente es un acto inaceptable, más aún cuando se comparte el mismo espacio. Todo mi acompañamiento a @ManesF ante las desacertadas declaraciones del Senador Torres".

Los protagonistas de esta historia por poco no se cruzan en la Vendimia. Facundo Manes estuvo la semana pasada en Mendoza, y participó de varias actividades. Estuvo en San Rafael con la asunción de autoridades radicales, tuvo agenda pública y privada con los intendentes radicales Tadeo García Zalazar y Ulpiano Suarez, y estuvo en el Carrusel. Y se fue el sábado a la tarde, cuando Torres estaba llegando a nuestra provincia.

Más allá de la anécdota, y los enfrentamientos a 1.800 kms de Buenos Aires, lo que ocurre de verdad en la alianza opositora es que tanto en el PRO como en la UCR -más, entre los radicales- hay diversas posturas respecto de cómo pararse frente al problema de la deuda, y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que divide aguas no sólo en el Frente de Todos, donde La Cámpora ya avisó que no lo van a aprobar, sino en la principal oposición. La foto de Manes rodeado de banderas de Ucrania que los legisladores del PRO habían llevado al Congreso la semana pasada, es sólo la punta del iceberg de enfrentamientos mucho más profundos, que comprometen la estabilidad de la oposición.

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