Esta es la dieta de expertos para frenar el envejecimiento

Si bien el envejecimiento es un proceso natural que simplemente no se puede evitar y que nos sucederá a todos los seres humanos, la batalla no está del todo perdida y existen ciertas herramientas a las que podemos acudir para disminuir el impacto del paso del tiempo.

La principal clave es cuidar el modo en cómo vivimos ya que esto puede ayudar a disminuir los signos físicos del envejecimiento.

Lo primero: cuidar al órgano más grande

Como es sabido el órgano más grande que tenemos los seres humanos es la piel y puede que ignoremos el vínculo crucial entre la nutrición y el logro de una buena piel. Es que el cuidado de la piel siempre debe comenzar desde adentro. Una dieta saludable es una forma de mejorar su salud en general, pero los médicos dicen que la clave para una piel rejuvenecida se debe en gran medida a la variedad de sus comidas.

¿Cómo retrasar el envejecimiento de forma natural?

Existen numerosas recomendaciones al respecto, pero principalmente se debe evitar el consumo de altas cantidades de grasa y azúcar ya que contribuyen a un envejecimiento acelerado.

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También los especialistas recomiendan estimular la producción de nuevas células de la piel y en ello el colágeno juega un papel crucial en el desarrollo de las arrugas y la elasticidad de la piel.

En este sentido, según publica el portal Terra, tener una dieta saludable no es simplemente una cuestión de lograr el equilibrio correcto, también se trata de comer los alimentos que promoverán la curación y la regeneración en lugar de comer alimentos que causen inflamación e irritación. Así es que para nutrir una piel joven en los próximos años se recomienda comer productos coloridos, variados y cultivados localmente.

También es importante reducir el consumo de carbohidratos ya que, comer grandes cantidades sin quemar la energía podría hacer que tu piel sufra rápidamente. Los carbohidratos se descomponen en azúcares en el cuerpo y todo lo que no se quema permanece como un exceso de azúcar en el cuerpo, que finalmente se une a las proteínas y las grasas.

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