López Murphy en Mendoza y la eterna pregunta sobre el dólar

El economista de raíz radical y referente liberal llegó a nuestra provincia para disertar sobre el país luego de las elecciones de las resultó electo diputado nacional.

López Murphy en Mendoza y la eterna pregunta sobre el dólar

Por:Jorge Fernández Rojas
Periodista/Analista

Hace 52 años que Ricardo López Murphy  es protagonista, intérprete y hasta narrativo de la gran novela económica y política de la Argentina. Tiene 70 años y suelta una sonrisa y ensaya uno de sus tantos gestos con su cara generosa, cuando le recuerdan cuántas veces le preguntaron en su vida pública: ¿qué pasa con el dólar López Murphy?

Se le nota que transcurre un tiempo de bonanza política, tiene perfil de consultor económico (lo es) pero con el resultado de la elección legislativa que lo llevará nuevamente a la Cámara de Diputados de la Nación su figura se potencia más. Su partido de centro derecha Republicanos Unidos tiene gran predicamento en el sector empresario que participó de la interna de Cambia Mendoza con Rodolfo Vargas Arizu a la cabeza. Y por eso está en Mendoza. Ayer lunes 15 conferenció sobre esta consigna: "Argentina después de las elecciones".

En uno de los recintos del Hotel Diplomatic tuvimos este encuentro con el referente de uno de los sectores de Juntos por el Cambio. En esta entrevista se notarán dos aspectos: la desconfianza que le tiene a Alberto Fernández y un desafío que le lanza al disrruptivo Javier Milei.  

Qué economía tenemos que esperar los argentinos

Las razones del dólar

-¿Cuáles son las razones centrales del problema del dólar?

-Son varias las razones: el atraso (cambiario), la inflación, la falta de reservas, la falta de confianza, y las circunstancias excepcionales que tuvimos este año. El crecimiento de Brasil nos ayuda mucho pero eso no se va a verificar el año que viene. La gente se hace preguntas como por qué no hay un programa (económico). No se sabe qué hará el gobierno y al no haber reglas de juego entonces genera acciones de cobertura. El otro problema es el cepo, es como si usted dijera: "no invierta acá".

-¿Entonces qué tiene que pasar?

-Lo primero que tiene que ocurrir es que el gobierno explique qué hará. Una excusa eran las elecciones, era un barrido debajo de alfombra. Ya pasaron las elecciones.

-El presidente dijo que enviará un proyecto de plan económico al Congreso.

-Cuando lo envíe voy a poder opinar.

Una cuestión de Fondo

-¿Y si el gobierno suma en ese proyecto el acuerdo con el FMI?

-Ahh esa sería una novedad importante. Un programa que tenga el aval técnico del Fondo sería importante. Eso no lo veo aunque puede ser una negociación que desconozco. Pero si ocurre será el debate que dominará todo el verano. Si ocurre, entonces el Congreso discutirá medidas presupuestarias, monetaria y precios públicos, sería un gran paquete.

-¿Ese presunto plan a qué necesidades o exigencias debería responder?

-Debería responder a qué régimen fiscal y monetario tenemos, que es lo que hay que resolver. Las circunstancias del mundo y la región serán más exigentes. Es vital que tengamos mucha competitividad para resolver el problema del empleo. Parte de esta solución es llevar a todos los planes sociales a empleos al sector privado. Por eso las empresas necesitan ser competitivas.

-¿Dadas estas circunstancias qué utilidad tiene el peso?

-Se ha deteriorado muchos se le han quitado trece ceros a la moneda y probablemente vayamos por tres más, y eso no es bueno, yo no lo hubiera hecho nunca.

-¿En base a su experiencia qué puede suceder con el dólar de aquí en más?

- Actualmente el dólar marginal es muy alto, entonces depende de las políticas que se sigan. Si hay un acuerdo serio, robusto, consistente, que reduce dramáticamente el déficit y la creación monetaria, y la vez, mejora la competitividad de Argentina, probablemente no habría grandes novedades con el dólar, pero no veo eso que usted dice (del acuerdo propuesto por Alberto Fernández).

-Me baso en los dichos del presidente luego de conocer el resultado de las elecciones.

-Primer tiene que haber cohesión en el gobierno.

-¿Usted habla del "factor CFK"?

-No, hablo del presidente que un día dice una cosa y al otro día, dice otra. Lo que pasa que usted me plantea una novedad, que Argentina se parece a Uruguay, donde se explicitan todas las variables y el presidente es coherente y los funcionarios le dan importancia al riesgo país a controlar la inflación y a preservar la credibilidad.

Ahh pero Macri...

-¿El gobierno de Muricio Macri tiene alguna responsabilidad de esta situación que hoy vivimos?

-No de esta situación, pero sí de otros problemas. Tuvo la oportunidad que la gente lo valoró y que se decepcionó por la performance. Y esas cosas son costosas. La vara de medida que ahora se le pone a la coalición opositora es mucho más alta porque aquella experiencia está cargada en la memoria. Entonces habrá que tener un programa y una mayoría ostensible. Recuerde que Macri ganó con el 34% y nadie le preguntó cómo gobernaba.

-¿Por qué dijo en el festejo del triunfo electoral de Juntos por el Cambio que no debían disputarse las candidaturas ahora para el 2023?

-Porque sería un error gravísimo. Porque si eso pasa no iría en línea con el problema que hay que resolver, que es formular un programa a la sociedad, darle una narrativa consistente con ese programa, mejorar la gobernanza de la coalición y ampliarla aún más para generar las condiciones de gobernabilidad que el país necesita.

-¿Qué le inspira o provoca Javier Milei?

-Lo conozco de hace mucho tiempo. Ha estado con un leguaje agresivo sobre el sistema político argentino poniendo a todos en la misma bolsa. Yo no tengo esa opinión. Pero me parece que nos enfrentamos a un escenario diferente. Creo que nos dirigimos a una elección tremendamente polarizada y el que saque más del 45% noquea en primera vuelta. No habrá segunda vuelta. Y la pregunta para Milei será: ¿cuál es la actitud que se tendrá ante esto?