La moringa es un producto natural que viene en forma de hojas, en polvo, en semillas, y muchas más. Cómo actúa en el sistema.
Este superalimento te ayudará a combatir la presión alta
La moringa es uno de los superalimentos con más propiedades. Debido a eso, especialistas en salud recomiendan esta planta no solo para bajar de peso, sino también porque ayuda a regular la hipertensión arterial. Consumirla en sus distintas variedades ayuda a combatir este problema de salud tan común en algunas personas.
Se trata de una planta medicinal que cuenta con una gran cantidad de vitaminas y minerales como hierro, carotenoides, quercetina, vitamina C, polifenoles, ácido clorogénico, entre otros, que le proporcionan un potente efecto antioxidante y antiinflamatorio. De hecho, también se la conoce como "árbol de la vida".
La hipertensión arterial es una condición en la que las paredes de las arterias reciben sangre de forma demasiado acelerada, por la cual reciben una fuerza más adecuada de lo recomendable. Esto es causado por la cantidad de sal que tiene cada persona, así como también por los niveles hormonales, los riñones y el sistema nervioso, entre otros posibles motivos.
Se habla de hipertensión cuando las paredes de las arterias reciben la sangre con más fuerza de lo normal.
Médicos recomiendan acompañar la ingesta de moringa con actividad física y una alimentación general saludable. Estos factores en su conjunto incidirán en la reducción de la presión.
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La clave de la moringa es que actúa rápidamente. Según estudios, los efectos antihipertensios se empiezan a esparcir en el sistema dos horas después de haberla consumido.
La moringa puede molerse, hacerse aceite, concentrarse en cápsulas, y más.
Cómo consumirla
La moringa es muy versátil. Puede encontrársela en forma de té de moringa o consumirse en forma de semillas. Además, las dietéticas o tiendas naturales suelen vender cápsulas que tienen distintas concentraciones de moringa. En estos casos, es importante consultar a un nutricionista o médico antes de ingerirla.
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Otra forma de consumir la moringa es en polvo. El polvo se puede agregar a sopas, jugos, café o yogures.
Por último, también vienen aceites de moringa. El aceite es extraído de las semillas de la moringa a través de la técnica de prensado en frío.
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