La forma más fácil de sembrar estos frutos del bosque.
Tips para cultivar una planta de arándanos en maceta
Los expertos en agricultura aseguran que los arándanos se posicionan como una de las frutas más fáciles que existen para cultivar en casa. Una de las principales razones por las que son tan elegidas es que hay muy pocas posibilidades de que se enfermen o sufran una invasión de plagas, aunque sí cuentan con sus exigencias.
Estos frutos del bosque aman el suelo ácido y necesitan un medio de cultivo húmedo y bien drenado. Por este motivo, muchas personas optan por plantarlas en macetas para controlar mejor las condiciones de la tierra.
Los jardineros profesionales garantizan que lograr los niveles de ácido que necesitan los arándanos es una tarea bastante fácil. Lo primero que se debe hacer es conseguir una mezcla de bonote que ayude a retener el agua por más tiempo y algo de materia orgánica (como el moho de las hojas) que sirva para acondicionar la tierra.
También es bueno alimentar rutinariamente a las plantas con un fertilizante a base de harina de semillas de algodón orgánico o harina de plumas. Los productos diseñados para azaleas, rododendros, acebos o árboles de hoja perenne funcionarán para estos frutos rojos.
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El mejor pH para el Vaccinium corymbosum oscila entre 5,0 y 5,5. El abono especial para las plantas ácidas mantendrá el contenedor en ese rango. En el caso de que tengas dudas y quieras ser más exacto, existen algunos medidores electrónicos que te ayudarán a determinar el nivel.
Las raíces de los arándanos crecen cerca de la superficie del suelo; por esta razón, es necesario regarlos con regularidad, ya que las macetas se secarán rápidamente. El tamaño de los frutos y la formación de flores mejorarán con el agua adecuada. Los jardineros profesionales recomiendan evitar excederse con el líquido, ya que podría pudrir por completo la planta.
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