Claves para evitar posibles enfermedades.
Así se congela pescado y marisco de forma segura
Millones de personas día a día consumen pescados y mariscos. La gran mayoría de ellos los compran frescos, comen una parte, y el resto lo congelan para poder consumirlos cuando deseen.
Sin embargo, es fundamental tener en cuenta algunos cuidados para evitar que el producto desarrolle anisakis o algún otro patógeno que pudiera infectarnos más adelante.
Además, estos tips son fundamentales para que se pueda conservar de la mejor manera todo su sabor y propiedades organolépticas.
1. Congela el pescado lo antes posible
Es importante que no guardes el pescado unos días en la heladera para después congelarlo. Para una correcta congelación el tiempo transcurrido entre la captura y el congelado debe ser el mínimo posible por lo que según llegues de la pescadería debes congelar las piezas que no te vayas a comer en uno o dos días.
2. Antes de congelar el pescado
Lo primero que debes hacer es lavar bien el pescado poniéndolo bajo el grifo de agua, para retirar escamas y restos de sangre que puedan haber venido en el envoltorio de la pescadería. Si no lo hizo ya el pescadero, también es necesario que quites todas las vísceras. Seca el pescado antes de congelarlo para que no tenga humedad.
3. No es lo mismo congelar pescados enteros que pescados en trozos
Dependiendo de el uso que vayas a dar al pescado es conveniente que lo tengas listo para cuando lo vayas a cocinar. Por eso es mejor que congeles las piezas de ración o las que vayas a cocinar en el horno enteras, para que estén así cuando las vayas a consumir.
Ver: Así hacemos el "chimichurri" de las pizzas
Para las piezas que quieras consumir en rodajas, delicias, lomos, etc, es preferible que las cortes en las porciones deseadas y después las congeles ya en trozos. Aquí puedes aprender cómo trocear un salmón entero para su máximo aprovechamiento y aquí tienes los consejos para porcionar correctamente una merluza entera.
4. Al congelar el pescado y el marisco, recuerda este consejo
Guarda el pescado y el marisco en la zona más fría del congelador, -suele ser el primer cajón- y, dependiendo de la cantidad de pescado que metas en este electrodoméstico, dale al botón de potencia máxima durante una hora, para que los alimentos que metes no hagan bajar la temperatura de lo que ya tienes congelado.
5. En qué recipiente se debe congelar el pescado
Puedes congelar el pescado y marisco utilizando todo tipo de envases como bolsas de plástico para congelación, envolviendo las piezas en papel de aluminio, utilizando fiambreras o tuppers herméticos, etc, según tus necesidades.
Si utilizas bolsas de plástico es preferible que tengan cierre zip o que una vez cerradas las asegures con unas gomas. Si eliges otros sistemas, lo importante es que consigas un cierre hermético que evite que entre humedad o que se salgan jugos y olores.
Ver: El test viral que te revelará algo que no tenías en cuenta
Es importante que no haya mucho aire en contacto con el pescado, por lo que si es posible recomendamos que uses paquetes o envoltorios que puedas vaciar al máximo como bolsas o recipientes al vacío.