El referente Fernando Rizzo expresó sus mayores preocupaciones en cuanto al inicio de clases presenciales en Mendoza y contó la intimidad de la reunión con el Director General de Escuelas.
Los padres y tres puntos de conflicto por el inicio de clases
Los Padres Organizados de Mendoza se reunieron el 20 de enero con el Director General de Escuelas, José Thomas, para llevar su reclamo sobre el retorno a clases de forma presencial pero la respuesta de las autoridades no los dejó del todo conformes.
El vocero de esta red federal en Mendoza, Fernando Rozzi, en diálogo con el Post mencionó los tres puntos conflictivos de la reunión con el funcionario. En principio, el estado de las escuelas: "No puede ser que no sepamos cómo están las escuelas hoy. Dicen que los directivos demoran los informes del estado de las escuelas y que solo desde junio han podido trabajar dentro de los establecimientos, esos son 7 meses para arreglarlas".
En cuanto a la "bimodalidad", es decir, un híbrido entre clases virtuales y presenciales, a Rizzo le quedaron más dudas que certezas: "¿Cómo nos vamos a organizar para llevar a los chicos a la escuela? Las mujeres son las más afectadas porque se han tenido que quedar en la casa y pedir permiso en sus trabajos. No podemos tener 30 chicos en el aula, tenemos que tener 15, ¿cómo se van a organizar esas clases?".
Una imagen de una reunión virtual de padres organizados.
Este tema está vinculado también al transporte: "Los chicos de primaria tienen que trasladarse con los padres. Nos dijeron que existen transportes escolares pero no tenemos mayor conocimiento de cómo funciona. Tendría que tener más disponibilidad y estar mejor informado si existe este sistema. Cuando nos juntamos con Thomas no había mucha definición del traslado. Va a ser de acuerdo a los casos particulares de escuela por escuela".
"No nos fuimos con soluciones satisfactorias", concluyó el vocero de una organización de incalculable cantidad de integrantes: "nos reunimos virtualmente, tenemos muchos grupos de WhatsApp. Yo estoy en cuatro principales, pero cada papá o mamá que participa de esos grupos a la vez comunica en otros donde están los papás y mamás de los compañeros de sus hijos o muchas veces de la escuela en general". Rizzo calcula que pueden haber entre 300 y 400 miembros activos.
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Es una organización que empezó con reclamos en agosto o septiembre del año pasado para el retorno a clases en Buenos Aires y ahora se trasladó a 21 provincias del país con más de 35 organizaciones. Pero el antecedente de este grupo en Mendoza son los reclamos de los padres ante los paros en los colegios de la Universidad Nacional de Cuyo.
Tienen una integrante que es mamá y docente en Tupungato y otra en San Rafael pero les está costando mucho llegar a esas zonas. Sin embargo Rozzi aseguró que muchos les escriben a su página de Facebook. Entre los integrantes hay papás de alumnos de la escuela Tiburcio Benegas, Pablo Nogués, así como de colegios privados como Santo Tomás, Don Bosco, Rainbow, que están en contacto desde junio del año pasado.
Padres organizados en la reunión con Thomas
"Me interesa buscar padres en otros lugares. Los padres dicen que están mejor así. No registran como un problema que los chicos no estén en la escuela, chicos que se fueron a trabajar y no van a volver", resaltó Rozzi.
En este sentido, mencionó que el sábado 6 de febrero los recibirá el ministro nacional Nicolás Trotta por la mañana en Buenos Aires de forma presencial y están evaluando que algún representante de Mendoza pueda viajar: "Nos da lo mismo que sea de un color político o de otro siempre que nos escuchen y tengan poder de decisión".
"Nos invitaron a la marcha para apoyar el proyecto de educación como servicio esencial del estado pero decidimos no asistir como organización, si alguien desea ir individualmente será su decisión", aseguró aunque se pronunció a favor de que la educación sea "esencial": "No podemos estar sin educar. Si hay un proyecto de ley que apunta a eso pero la esencialidad hace que se garantice un servicio mínimo que podría ser virtual y no queremos caer en ese truco, queremos que sea presencial y esencial".
Los docentes también tienen voluntad de volver a las aulas exigiendo que se cumplan los protocolos correspondientes. Padres Organizados no ha mantenido diálogo ni reuniones con los sindicatos docentes como SUTE o SADOP pero sí con docentes en particular o papás y mamás que también son docentes: "No entramos en la lógica sindical porque no nos corresponde. Entendemos que necesitan volver a la presencialidad para ejercer su profesión como corresponde. Son los que nos dicen los problemas edilicios de la escuela o del personal sino cumplen con sus tareas. La maestra siempre sabe por dónde está la filtración, cuando hay agua potable en el baño, cosas que nuestros hijos muchas veces no se dan cuenta".
Entienden que el rol docente es también social: "No pueden estar las escuelas cerradas y los chicos sin educarse. Esto tiene perjuicios graves no solo en lo educativo, sino en los riesgos de los más vulnerables. Los docentes detectan necesidades y violencias porque ven la cara de los chicos todos los días".
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"Como se abrieron casinos y cines y se buscó solucionar problemas económicos, se tienen que abrir las escuelas. La educación no fue una prioridad el año pasado", dijo y reflexionó: "Las condiciones las tenemos que crear. No esperar que estén. Creo que la educación es responsabilidad de la familia, de los padres, lo que la escuela hace es complementario, es más específico".
"Mientras estén en la educación formal tenemos que acompañar a nuestros hijos porque no siempre el estado se hace cargo de la parte que le corresponde. Hay que estar exigiendo el control y el derecho a la educación que tienen todos los niños y es un derecho fundamental de ellos. Nos tenemos que convertir en la voz de ellos cuando está siendo vulnerado ese servicio porque el estado tiene que brindarlo por las mismas leyes", reflexionó.
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