La Corte Suprema recibió las defensas de los 4 estados acusados de fraude y deberá definir si debe hacerse una elección de contingencia, que es cuando el Congreso elige a los mandatarios.
EEUU: 19 estados apoyan la demanda de Trump y 22 la rechazan
Ayer cerró el plazo que había establecido la Corte Suprema de Estados Unidos para que los Estados acusados de haber llevado a cabo una elección fraudulenta respondieran la acusación y el tribunal aceptara tratar el caso. La respuesta de los cuatro Estados demandados (Georgia, Pensilvania, Michigan y Wisconsin) fue muy dura, acusando a Texas y los otros 20 Estados que demandaron de "actitudes sediciosas".
El Fiscal General de Texas Ken Paxton redactó la demanda argumentando que esos cuatro estados violaron la Cláusula de Electores de la Constitución Nacional porque hicieron cambios a las reglas y procedimientos de votación a través de acciones ejecutivas de sus gobernadores, en vez de a través de las legislaturas estatales.
La Constitución estadounidense indica que cualquier cambio en la metodología del voto debe ser sometida a un plebiscito y luego aprobada por la Legislatura estatal.
Este año, todos los Estados demandados introdujeron el voto por correo universal, suspendieron la verificación de firmas y permitieron que los votos lleguen hasta varios días después del 3 de noviembre por decreto del Gobernador o por fallo de un Tribunal local. Según Texas, esto hace que los resultados de la elección no sean válidos y que para mantener la integridad de una elección federal, el Presidente y Vicepresidente debe ser elegido en el Congreso, como establece la Constitución Nacional en una "elección de contingencia".
Para el Fiscal General de Estados Unidos "no hubo fraude" en las elecciones
Al estado de Texas se sumaron otros ocho estados como demandantes (Alabama, Arkansas, Florida, Kentucky, Lousiana, Mississippi, Carolina del Sur, y Dakota del Sur) y otros diez Estados (Montana, Dakota del Norte, Nebraska, Kansas, Oklahoma, Utah, Misouri, Tennessee, Indiana, y West Virginia) como amicus curiae, es decir, que apoyan la demanda. En total, 19 Estados piden que la Corte Suprema se expida.
Por su parte, Arizona presentó un escrito propio, en sintonía con la de Texas pero que no exige un cambio en el resultado de la elección.
Ayer, todos los Estados gobernados por demócratas se unieron en defensa de Pensilvania, Michigan, Wisconsin y Georgia. En total, son 22 Estados los que defienden la victoria de Biden.
Por su parte, el Fiscal General de Pensilvania, el ultra-demócrata Josh Shapiro pidió que la Corte Suprema rechace esta histórica demanda: "El esfuerzo de Texas para lograr que esta Corte elija al próximo Presidente no tiene base ni de hecho ni de derecho. La Corte no debe aceptar este abuso sedicioso del proceso judicial y debe enviar una señal clara e inequívoca de que tal abuso nunca debe repetirse".
La Corte Suprema todavía no se ha expresado sobre esta causa, pero todo indica que no llegarán a votar antes del 14 de diciembre, cuando el Colegio Electoral elegirá a Joe Biden como Presidente Electo. Sin embargo, hasta el 6 de enero estos votos no son validados por el Congreso y una decisión del supremo tribunal podría generar una elección en Diputados y Senadores En ese caso, Donald Trump y Mike Pence podrían ser reelectos.
Fuente: La derecha diario
El fraude mediático contra Trump