El salteño Juan Ameri, del Frente de Todos, durante una sesión virtual comenzó un juego sexual que era visto por el resto de los diputados. Sergio Massa detuvo el debate y pidió la suspensión inmediata del diputado que fue aceptada por todos los bloques.
Un diputado K, a pleno sexo con su mujer en un debate
En la Cámara de Diputados, durante una sesión virtual, se produjo un verdadero escándalo, un bochorno. El diputado Juan Ameri, por el Frente de Todos por Salta, apareció en el zoom manoseando a su pareja. El presidente del cuerpo, Sergio Massa, detuvo la sesión y pidió la suspensión inmediata del legislador, para que sea evaluado por una comisión para establecer si le corresponde la expulsión.
Lo que se vio por las cámaras de televisión y lo que observaron algunos legisladores, no todo porque incluso algunos solicitaban saber por qué pedían la suspensión de Ameri, fue realmente algo nunca visto. Ya hemos visto a Estaban Bullrich (PRO) dejando una gigantografía suya para simular que estaba presente en un debate; el diputado Laspina, también del PRO, se lo vio cambiándose de ropa; y ahora el salteño Ameri manoseando a su pareja, porque según se justificó, quería saber cómo le habían quedado las prótesis y creía que no estaba conectado. Lo que realmente llama la atención, es que tanto el diputado Ameri y su espoa sabían que estaban siendo tomados por la cámara porque hasta incluso la miran.
Quienes vieron esta situación fueron los diputados que estaban en el recinto, los que seguían la sesión online no advirtieron lo que hacía Ameri durante el debate. Y esto sucedió mientras trataban el proyecto de ley de Defensa de los Activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional (FGS), que contempla la renegociación de la deuda que las provincias tienen con la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses).
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A Sergio Massa se lo vio muy enojado, pidió la inmediata suspensión del legislador, que fue acompañda de inmediato por todos los bloques.
Ahora, una comisión va a analizar si le corresponde la expulsión, que por el tono de voz y el repudio a lo que hizo Juan Ameri, parece que ese será su destino: ser expulsado del Congreso. La comisión de cinco miembros tendrá un plazo de 60 días para evaluar si la sanción será definitiva o no.
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