Francisco Carbone estudia Medicina. Pero asegura que "perdieron" sus notas de 4to año, y que ahora le ponen trabas incluso para volver a rendir. Hizo una denuncia penal, otra administrativa, una más a la Oficina Anticorrupción. La respuesta de la Facultad.
Denuncia a la UNCuyo de perder sus notas y adulterar actas de Medicina
La vida del estudiante avanzado de medicina y auxiliar de cátedra Francisco Carbone (30), se transformó en un infierno académico, un día cualquiera de mediados de 2015.
Con las materias de cuarto año aprobadas en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Cuyo, según aseguró en una denuncia penal en la Justicia Federal, se presentó a rendir Cirugía, de quinto año de la carrera. Le dijeron que no podía, porque "adeudaba materias de cuarto año", algo que sería imposible. Tanto Carbone como el decano de la FCM Roberto Miatello, dijeron a este diario que el régimen de correlatividad no permite siquiera cursar quinto año, si no está cuarto aprobado. Pero tal parece que Carbone pudo cursar materias de quinto, y luego presentarse a rendir Cirugía ya entrando en la última curva de su carrera de médico. Sin embargo, no le fue posible por aquella explicación que le dieron, respecto de que "adeudaba" materias de cuarto año.
A partir de allí, todos los reclamos para que le reconocieran a Carbone la validez de sus materias fracasaron. Incluso, el joven denunció que las actas con sus asignaturas aprobadas "desaparecieron". Y que después, de una forma desconocida, le llegaron copias al estudio de la abogada que designó para que lo represente en los reclamos administrativos, Daniela Santos. También el recibió un juego de copias, de personas desconocidas.
Cinco años después, Francisco alega que no pudo rendir materias de quinto año, que tuvo que cursar y rendir nuevamente materias de cuarto año, que le pusieron trabas de todo tipo "hasta hacerme perder la posibilidad de engancharme en quinto año" contó al POST. Los desacuerdos fueron tales, que Carbone presentó una denuncia penal en el Juzgado Federal Número 1 (click aquí para verla completa), con el patrocinio de Lucas Lecour, un reclamo administrativo con la abogada Daniela Santos, y remitió copias de toda la documentación con la que cuenta, a cada uno de los diez diputados nacionales y de los tres senadores nacionales por Mendoza. También radicó una denuncia en la Oficina Anticorrupción. La denuncia penal es muy grave, por presunta adulteración de documentos públicos, en referencia a las actas con lo que Francisco consideró la aprobación de sus materias, que le llegaron de modo anónimo y que -antes- nadie podría hallar por ninguna parte.
Al revisar la documentación y las denuncias aportadas por el estudiante, y la respuesta que dio la Facultad de Medicina a través de su decano, es obvio que la diferencia inicial que desencadenó esta tragedia de malentendidos, todos perjudiciales para Francisco, radica en establecer si el alumno aprobó o no las materias de cuarto año. Para él, está claro que sí y aportó lo que considera las pruebas. Para la Facultad, no. Explicaron que debió rendir además exámenes orales, en los que fue considerado ausente.
Los hechos denunciados
En resumen, los puntos principales de la denuncia de Francisco Carbone en la justicia federal, son los siguientes:
- Luego de aprobar el examen global del ciclo básico (de 1er. a 3er. año), cursó el 4to año a partir del mes de agosto de 2013, hasta agosto de 2014. Ese año se le incorporó formalmente como docente rentado, del Instituto de Fisiología de la FCSM. Este dato pudo ser comprobado en registros públicos, por el POST.
- A mitad de año de 2015 luego de haber cursado se presentó a rendir el examen final de la materia "Cirugía" correspondiente a 5to. Año de la carrera de Medicina, en el Hospital Central de Mendoza. El secretario de la materia no se lo permitió, y le explicó que no figura en la lista de alumnos que podían rendir. Carbone llevaba siete semanas cursando la materia.
- En la sección "Alumnos" de la facultad, le insistieron con que debía materias de 4to. Explicó que ello era imposible, ya que por la correlatividad, si hubiese sido cierta la "deuda" de las materias, no podría haber cursado Cirugía en 5to. Revisaron computadoras y legajos, y no hallaron nada que acreditase la aprobación de las materias de cuarto año, siempre según la denuncia.
- Carbone indica a la Facultad que rindió cada una de las cátedras con diversos profesores, con notas casi todas excelentes. Le insisten con que "no figura en el sistema". Le indicaron que debía volver a cursar y rendir cuarto año, porque no había forma de acreditar sus dichos.
El desánimo ganaría a cualquiera en semejante situación. Pasó el tiempo, Carbone no pudo seguir normalmente sus estudios. Este año pidió una licencia estudiantil a causa de una intervención quirúrgica. Y luego, los enredos administrativos para poder rendir como alumno "no regular" siguieron a todo trapo. Entre "desencuentros" administrativos, cambios de sede de exámenes, notas que el estudiante cuestionó, y abundante cruce de mails, notas y notificaciones; Francisco Carbone no pudo volver a rendir las materias de cuatro año que ya consideraba aprobadas, con tiempo suficiente como para cursar 5to desde este cuatrimestre. El joven cree que hay alguna "mano negra" en el camino, que le impide seguir normalmente su carrera. "Esto me afectó mucho como persona, en mi desenvolvimiento con los demás... me ha hecho un daño enorme..." refirió al Post. Tampoco pudo rendir por las plataformas Zoom ni Google Meet, por problemas tecnológicos, y le pusieron ausente, dato que fue confirmado por la facultad. El estudiante contó a este diario que los profesores se sorprendían de verlo nuevamente en los exámenes, de "materias que ya había aprobado" dijo.
La trama completa de lo ocurrido este año puede verse en la denuncia original de Carbone, en este link. Con dos puntos importantes. Presentó un recurso de reconsideración al Consejo Directivo de la Facultad. Como no recibió respuesta, entonces presentó un amparo en la justicia federal.
Ocurrió un hecho que profundizaría el curso legal de esta historia. Al domicilio particular de Carbone y al estudio de su abogada llegaron sobres con actas volantes de las materias que él consideró aprobadas en 2013, 2014 y 2015. Las presentó como pruebas de que había aprobadas las cátedras de cuarto año. "Este sobre venía sin remitente..." pero "da cuenta que podría existir algún tipo de adulteración o libros de acta paralelos" denunció el estudiante. En las actas se ve con claridad un gran desempeño del alumno y una "nota final".
La prueba que los abogados de Carbone consideran clave, está en las copias de las actas, y en una ordenanza de la FCM que indica que las evaluaciones de esas "rotaciones" (así se llaman) forman parte de una calificación final de la materia. "La calificación final en cada rotación clínica incluye, además del examen final, la evaluación del desempeño del alumno con pacientes, como evaluación de proceso durante la rotación" dice el plan de estudios vigente, de acuerdo a la prueba presentada por Carbone y que la FCM tiene publicadas en su propio sitio.
Como se puede ver en las actas, están foliadas, repletas de firmas, y tienen una nota final. Aun así, y por consejo de muchos, Francisco intentó cursar y rendir de nuevo y tampoco pudo, por las razones ya enumeradas. En el siguiente slide, la prueba más importante del caso, a juzgar del denunciante:
El descargo de la Facultad
El licenciado Roberto Miatello, decano de la Facultad de Medicina de la UNCuyo, dijo que el alumno "no tiene razón" en su reclamo porque "lo que él muestra como actas que a su juicio prueban que aprobó una materia" no son tales. Y que para aprobarlas, debió "rendir exámenes orales para cada una de las materias de cuarto año". Miatello afirmó que Carbone "no rindió en ninguna de las oportunidades que tuvo en estos años, inexplicablemente" y que lamentablemente la situación judicializada "complica todo".
El decano dijo que la facultad tuvo "disposición" a resolver el problema, pero que era insalvable el obstáculo de la falta del examen oral final de cada materia. "En el segundo ciclo de cuarto año en adelante, hasta sexto, la oralidad es clave. Los alumnos se la pasan en los hospitales, tratando con pacientes, con médicos, luego tienen que aprender a diagnosticar... No basta hablar de un tema... hay que conocerlo..." dijo, e insistió en que a su juicio, el alumno Carbone "ha confundido la documentación" e insistió en que "nunca se presentó" a dar los exámenes orales.
Respecto de las actas que muestra Carbone, afirmó Miatello que "no son actas de examen. Son diferentes y tienen tratamiento diferente" y que "le hemos llamado muchas veces y le hemos ofrecido ayuda para regularizar la situación", pero que en este caso "se confundió un documento de evaluación por otro". También descartó que el plan de estudios vigente contemple que estas "rotaciones" impliquen una calificación final de cátedra.