Barcelona fue humillado por Bayern Munich, que lo venció 8 a 2, avanzó a Semifinales y ahora aguarda por el vencedor de Manchester City - Olympique de Lyon.
8 a 2 de fútbol total
Lionel Messi no podía levantar la cabeza. Su vista estaba fijada en el césped del Estadio da Luz, de Lisboa. Por la cabeza del rosarino pasaba la misma frustración e impotencia que tantas veces sintió con la Selección Argentina, pero ahora la experiencia la estaba rememorando con la camiseta de Barcelona, esa con la que ganó todo.
Iba solo media hora de partido y su equipo perdía 4 a 1 contra Bayern Munich. La humillación futbolística se daba en el marco de los Cuartos de final de la Champions League. Quedaba tiempo por delante y la historia iba a ser peor. El sueño de la Orejona llegaba a su fin de la peor manera en una temporada digna de ser olvidada rápidamente.
El campeón alemán fue una maquinaria demasiado perfecta para todas las tibiezas del elenco de Quique Setién. De principio a fin, Bayern Munich fue demasiado rival para los catalanes. Los dirigidos por Flick llegaban en cantidad y calidad por todos los sectores de la cancha, desbordaban y jugaban con libre albedrío. El resultado final fue tan justo como corto. Sí, la diferencia pudo ser incluso mayor.
El Blaugrana no logró cerrar la herida de LaLiga que perdió sobre la hora y se despidió de la Champions con un 8 a 2 que terminará con algunas cabezas rodando. El Munich, por su parte, aguarda con la vara altísima por su rival en las Semifinales. El mismo se sabrá este sábado cuando Manchester City y Olympique de Lyon definan sus asuntos pendientes.
La otra Semifinal será animada por París Saint-Germain y Leipzig.
Los goles