Sigue la controversia por la acordada que dispone el paso de personal del fuero Civil al de Familia, una cuestión resistida por un grupo de magistrados.
Nanclares, durísimo contra los jueces "rebeldes"
En la apertura del año judicial el presidente de la Suprema Corte de Mendoza, Jorge Nanclares, apuntó con todo a los jueces civiles que se niegan a aceptar la acordada que dispone el traspaso de personal desde ese fuero al de familia.
El juez dijo que la "acordada de la discordia" tiene por objetivo evitar poner en peligro la oralidad en los juzgados de Familia. Indicó que es legítima tanto en la forma como en el contenido y aseguró que de ninguna forma se ha cometido algún tipo de ilegalidad.
Igualmente el magistrado hizo una autocrítica sobre la falta de diálogo previo y subrayó que se han ofrecido alternativas a los jueces rebeldes. Además, se mostró sorprendido con "actitud intemperante" de los jueces civiles.
Nanclares consideró que los jueces que se manifestaron en el cuarto piso de Tribunales tras conocerse la acordada actuaron como una "patota". "Empatotarse y aplaudir en el cuarto piso no es una actitud de un juez", mencionó.
Ayer los jueces que están molestos por la acordada no asistieron al acto de apertura del año judicial a modo de protesta, pero a pesar de eso Nanclares insistió en está abierto el diálogo con esos magistrados.