El debate por la actividad pesquera será uno de los temas centrales en las negociaciones entre el Reino Unido y Bruselas que se iniciarán en marzo.
Londres prohibirá el acceso de buques pesqueros de la UE tras el Brexit
El gobierno británico anunció que envió al Parlamento un proyecto de ley que apunta a prohibir el acceso automático de buques pesqueros de la Unión Europea (UE) en aguas británicas una vez que se ejecute el Brexit y se cumple el período de transición de 11 meses posteriores.
El debate por la actividad pesquera será uno de los temas centrales en las negociaciones entre el Reino Unido y Bruselas que se iniciarán en marzo, debido a los reclamos del sector que culpa a la UE y a su política para la actividad por la paralización de la industria en la isla.
"Este nuevo proyecto de ley de pesca retoma el control de nuestras aguas, lo que permite al Reino Unido crear una industria pesquera sostenible y rentable para nuestras comunidades costeras, al tiempo que garantiza la salud a largo plazo de la pesca británica" indicó hoy la ministra Medio Ambiente, Theresa Villiers, ante la prensa. En un comunicado, Villiers, sostuvo que abandonar la fallida Política Pesquera Común de la UE es uno de los beneficios más importantes del Brexit.
"Significa que podemos crear un sistema más justo que permitirá que prosperen los hábitats marinos, con nuevos poderes para apoyar a nuestro sector pesquero y conservar nuestro maravilloso Blue Belt en el país y en el extranjero", expresó.
El proyecto impulsa el programa emblemático Blue Belt del gobierno británico al garantizar que la organización de "Manejo Marino" tenga los poderes que necesita para brindar asesoramiento y asistencia sobre pesca sostenible, planificación marina, licencias y conservación en el extranjero.
Por su parte, el ministro británico de Pesca, George Eustice, dijo a su vez, que el proyecto además de otorgar los poderes para implementar su propia política de pesca independiente y mejorar los hábitats marino, permitirá tomar decisiones basadas en la salud del stocks de peces del Reino Unido y no "en intereses creados".
Mientras que Barrie Deas, director ejecutivo de la Federación Nacional de Organizaciones de Pescadores, agregó que el propósito central del proyecto de ley es otorgar a los ministros del Reino Unido poderes para administrar las pescas después de dejar la UE.
Las nuevas disposiciones significan que el Reino Unido tendrá en cuenta los impactos del cambio climático en sus pescas, con un nuevo objetivo para avanzar hacia una "pesca climáticamente inteligente" en aguas británicas.
"El año pasado, nos convertimos en la primera gran economía del mundo en aprobar leyes para poner fin a nuestra contribución al calentamiento global para 2050 y la Ley de Pesca complementará esto", resaltó.
Dijo que el proyecto también reconocerá que muchas de las poblaciones de peces son "compartidas", ya que nadarán en las aguas del Reino Unido y de otros estados costeros y por eso será crucial la negociación con otros estados costeros ya que las capturas sostenibles no se pueden lograr sólo a través de la acción de un sólo país.