No sería para todos los trabajadores por igual y estaría sectorizada. Sindicalistas plantearon la necesidad de regular las plataformas digitales de delivery y el trabajo no registrado.
Fernández le afirmó a Moyano que es necesaria la reforma laboral
Este mediodía, Alberto Fernández almorzó con Hugo Moyano, sus hijos Facundo y Hugo Antonio y un grupo de sindicalistas afines. El presidente electo le reconoció, según publicó el diario La Nación, que es necesaria una reforma laboral aunque por sectores a través de los convenios colectivos de trabajo.
Fernández manifestó en la reunión -que duró tres horas- que no habrá reglas generales de flexibilización y que avalará acuerdos entre los sindicatos y empresas. El referente del Frente de Todos no dio nombres de su Gabinete ni medidas inmediatas que tomará en su primera semana en la presidencia.
Asistentes del almuerzo manifestaron que no hubo pedidos de Hugo Moyano para ubicar a sus hombres en el próximo Gobierno o en el Estado, ni tampoco reclamó por un bono de fin de año generalizado para todos los trabajadores. Además, no realizó ningún reclamo con respecto a la caída del salario en el último tiempo. Los presentes sí le plantearon la necesidad de regular las plataformas digitales de delivery y el trabajo no registrado.
Fernández es consciente "del revuelo" que vive la CGT (Confederación General del Trabajo), entre posiciones encontradas entre los secretarios generales Héctor Daer y Carlos Acuña y Moyano por el control de la central obrera.
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Sin embargo, para evitar inconvenientes inmediatos, el referente de Camioneros le confirmó a Fernández que el sindicalismo bajo su poder (municipales de Buenos Aires, Aeronavegantes, Ceramistas, Canillitas, Docentes, Apops, SOMU, Smata, entre otros) acompañará la gran movilización de la CGT para el 10 de diciembre, día del traspaso del poder.
Según consignó la agencia Noticias Argentinas, lograron limar "algunas asperezas durante la reunión", de la cual Fernández se retiró a las 16.15 sin hacer declaraciones a la prensa.