Negocios que cierran porque estén cerca de los centros de protestas y gases lacrimógenos, la imagen del país cae y las inversiones se retiran. Cae el empleo.
El devastador efecto de las protestas en la economía chilena
"Este es un terremoto silencioso, las bajas ventas están destruyendo la economía chilena", afirmó Horacio Carreño, quien tuvo que cerrar su restaurante por las constantes protestas y gases lacrimógenos.
Tras tres semanas de incesantes manifestaciones, que comenzaron luego de que el gobierno de Sebastián Piñera decidiera subir el precio del pasaje de metro, miles de micro, pequeñas y medianas empresas chilenas se han visto gravemente afectadas.
La paralización del comercio, de los servicios, del turismo y de todo lo que tenga que ver con el entretenimiento, como el rubro gastronómico, ha significado un golpe económico inesperado para quienes no tienen una gran suma de dinero para financiarse en momentos de crisis.
Ante este panorama, se teme que centenares de personas pierdan sus empleos.
Una semana, un punto de desempleo
"A la fecha ya se han perdido 70.000 puestos de trabajo, lo que equivale a casi un punto del desempleo. Si el país no vuelve a funcionar con normalidad en los próximos 10 días, me atrevo a decir que aquí están en juego 500.000 puestos de trabajo más", afirmó a BBC Juan Pablo Swett, presidente de la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica.
En medio de las protestas, algunos restaurantes han decidido continuar atendiendo público para hacer frente a las pérdidas.
Francisco Carreño, por ejemplo, ha tenido que disminuir en un 30% su personal. "Simplemente no me da, no puedo ser irresponsable y mantener gente si no puedo darles seguridad a largo plazo", comentó.
Por otra parte, según un catastro realizado por Swett, del más de poco más de un millón de pymes que existen actualmente en Chile, un 15% hoy está con serios problemas de liquidez debido a la crisis.
"La economía está trancada por completo. Está trancado el consumo, las decisiones de inversión de las grandes empresas y de las empresas extranjeras, y las contrataciones de personal. En términos económicos, en Chile se está incubando una tormenta perfecta", aseguró Swett.
A modo de ejemplo, el presidente de la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica precisó: "Solo en la industria del turismo, conformada por 9.000 empresas que emplean a aproximadamente a 170.000 personas, las reservas han caído en un 51%".
"La imagen país cayó muchísimo, la gente ya no quiere venir a Chile", agregó.