Un joven de 30 años tiene una grave y rara afección en los pulmones.
Primer internado en terapia intensiva por efectos del cigarrillo electrónico
Este viernes un joven de 30 años llegó a la guardia de una clínica privada por una molestia al respirar que había afectado incluso su rutina laboral desde hace varios días.
"Durante la fase de entrevista, me confirmó que había fumado tabaco tradicional desde los 15 años, más de un atado de cigarrillos por día, pero también me aseguró que al menos durante tres meses recurrió a los cigarrillos electrónicos con la intención de dejar el hábito", explicó la broncoscopista Roxana Berenguer a Infobae.
El paciente reconoció durante las entrevistas de rutina que los problemas con la falta de aire no eran de los últimos días, lo que lo llevó incluso a abandonar el consumo del cigarrillo electrónico a mediados de septiembre, un mes antes de la consulta.
"Una vez que se realizó una tomografía de tórax, detectamos que el paciente presentaba un infiltrado pulmonar bilateral. Para ponerlo en palabras coloquiales, el pulmón había cambiado de color, estaba blanco", reveló.
El infiltrado pulmonar representa el reemplazo del aire de los espacios alveolares por un elemento diferente: células, proteínas, sangre, diferentes tipos de líquidos. Además, presenta una inflamación en el tejido de los principales conductos que llevan el oxígeno a los pulmones. Se trata de un cuadro de gravedad en el campo de la neumonología y que se manifiesta en diferentes enfermedades.
La profesional realizó diversos análisis y determinó que el paciente había sido afectado por una extraña y muy grave enfermedad denominada proteinosis alveolar, una afección que se presenta a través de la acumulación de lípidos y proteínas en los alvéolos del pulmón. Ante tal situación de alarma, la especialista determinó de inmediato la internación del paciente en terapia intensiva.
"Fue algo muy llamativo porque la proteinosis alveolar es realmente una enfermedad muy rara. En mis 30 años de carrera y trabajando en muchísimas clínicas y hospitales, yo habré atendido apenas tres casos de esta enfermedad", aseguró Berenguer.
"Teniendo en cuenta los antecedentes del paciente, la ausencia de una infección pulmonar y su cuadro clínico, pudimos corroborar que se respondía a los patrones de enfermedades relacionadas al consumo del cigarrillo electrónico establecidos por los principales organismos de salud internacionales", advirtió Berenguer.
"Yo no estoy afirmando 100% que la enfermedad de este paciente estuvo ligada al consumo del cigarrillo electrónico. Sus 15 años previos de consumo de tabaco tradicional también pudo estar relacionado a eso. Pero sí me atengo patrones basados en estadísticas. En la mayoría de los casos que se reunían el mismo grupo de características previas, se trataba de pacientes que habían practicado el ?vaping'", completó.