El ex ministro K denunció un trato "arbitrario" por parte del juez federal Claudio Bonadio.
Marcha atrás: De Vido ahora no quiere pedir arresto domiciliario
El detenido ex ministro de Planificación Federal del kirchnerismo, Julio De Vido, desistió de reclamar que se le conceda el beneficio del arresto domiciliario por problemas de salud y denunció un trato "arbitrario" por parte del juez federal Claudio Bonadio.
En un comunicado difundido anoche por su defensa, se aseguró que Bonadio trasladó de manera sorpresiva a De Vido desde la cárcel el viernes último para cumplir la orden de realizar una pericia en el Cuerpo Médico Forense, dada por la Cámara Federal porteña.
"Como acostumbra suceder cada vez que en dicho juzgado se ordena una pericia, que luego da lugar a procesos nulos y peritos denunciados, por su intervención ilícita, una vez más Bonadio 'intentó' cumplir con lo ordenado por el superior al margen de la ley", sostuvo la defensa en el comunicado.
Bonadio, según el comunicado, ordenó el viernes último el traslado de De Vido al Cuerpo Médico Forense "de manera abrupta, sorpresiva, sin notificar a su defensa e impidiendo de este modo que esté presente un perito de parte".
Por ello, se denunció un trato "inhumano, cruel y degradante" hacia el ex funcionario detenido con prisión preventiva en la causa por los cuadernos de la corrupción. Ante ello se informó que desistió de reclamar el beneficio de la prisión domiciliaria.
De Vido está detenido en el caso cuadernos pero también en la investigación por defraudación en Yacimientos Carboníferos Río Turbio.
En esta última causa fue enviado ayer a juicio oral por el juez federal Luis Rodríguez.
La semana pasada, la sala uno de la Cámara Federal rechazó concederle la prisión domiciliaria pero ordenó a Bonadio la realización de exámenes médicos antes de volver a pronunciarse sobre el pedido.