Las comunicaciones empezaron a las 0.36 -dos horas y media después de hallado el cuerpo- y siguieron hablando hasta que se hizo de día.
Investigan 31 llamadas entre Cristina y Berni luego de la muerte de Nisman
El 18 de enero de 2015 el fiscal Alberto Nisman fue encontrado muerto con un tiro en la cabeza en el baño de su departamento de la Torre Le Parc. Un día después, el lunes 19, debía presentarse en el Congreso de la Nación para exponer y ampliar su denuncia contra la expresidenta Cristina Kirchner, a quien imputaba por el delito de encubrimiento por un presunto acuerdo con Irán en la causa AMIA.
A 1600 días de esa muerte investigan el entrecruzamiento de llamadas entre el ex secretario de Seguridad Sergio Berni y la ex presidenta luego de que hallaran muerto al fiscal. En total son 31 comunicaciones que empezaron a las 0:36, dos horas y media después de hallado el cuerpo, y siguieron hablando hasta que las 16.07.
Las comunicaciones, a las que accedió Clarín, son 22 llamadas telefónicas y 8 mensajes de texto enviados desde el celular de Berni a los celulares de Presidencia asignados a los secretarios privados de Cristina: Mariano Cabral y Pablo Barreiro. Y desde esos números a los de Berni.
Durante su declaración, Berni dijo haber llamado dos veces a Cristina Kirchner la madrugada en que se supo la muerte de Nisman. Sin embargo, según el resultado de cruces telefónicos, cinco de esas primeras comunicaciones suceden en dos horas y directamente desde la escena del crimen.
Nunca dijo nada acerca de que llamó a la Presidenta 11 veces más. Ni que la Presidenta lo llamó a él 18 veces. De hecho, habló con ella durante toda la madrugada. Antes de las 6:30 de aquel lunes, ya se habían comunicado 12 veces. Ocho fueron desde Cristina hacia Berni (5 llamadas y 3 mensajes) y las otras cuatro, todas llamadas, en sentido inverso.
La comunicación siguió hasta la tarde con 19 llamadas y mensajes más que Berni omitió en su declaración ante la fiscal Fein, en febrero de 2015, a pesar de que en aquel momento le pidieron expresamente que detallara la cantidad de comunicaciones que había tenido con la presidenta durante esa noche.
Ahora, intentan determinar qué órdenes recibió Berni y qué ordenó a quienes actuaban allí mismo. El ex jefe de la Federal, Román Di Santo, que estuvo en la escena del crimen aquella madrugada y además era el jefe máximo de los custodios de Nisman, nunca declaró en la causa.