Los cancilleres de ambos países se encontraron para establecer postura sobre el bloqueo económico a la isla y la situación de Venezuela.
Cuba y Rusia se unieron para apoyar a Maduro
Cuba advirtió que está preparada para afrontar los costos económicos y humanitarios que deriven de las sanciones que le impone Estados Unidos, mientras Rusia alertó sobre un interés de la Casa Blanca de generar una "confrontación militar" en Venezuela.
Estos asuntos fueron analizados hoy en Moscú por los ministros de Relaciones Exteriores de Rusia, Seguéi Lavrov, y de Cuba, Bruno Rodríguez, quienes ratificaron la antigua alianza estratégica entre sus países y lanzaron duras críticas contra la política exterior de la administración de Donald Trump.
"Compartimos con los amigos cubanos el convencimiento de que es inaceptable la presión sancionadora ilegítima y confirmamos nuestro rechazo categórico al bloqueo económico, comercial y financiero de Cuba por parte de Estados Unidos", remarcó Lavrov.
A su vez, Rodríguez se centró en la activación del Título III de la ley Helms-Burton, que permite a los estadounidenses demandar en los tribunales de ese país a las compañías que se beneficien de terrenos o inmuebles que les fueron expropiados en Cuba tras la Revolución de 1959.
Aclaró que en Cuba rige desde 1996 una ley que declara ilegal a la norma Helms-Burton, por lo cual este anuncio de la potencia norteamericana será inaplicable.
Esta postura contó con el completo apoyo de Rusia. "Compartimos con los amigos cubanos el convencimiento de que es inaceptable la presión sancionadora ilegítima y confirmamos nuestro rechazo categórico al bloqueo económico, comercial y financiero de Cuba por parte de Estados Unidos", dejó en claro Lavrov.
Ambos ministros se mostraron también de acuerdo con el análisis de la situación venezolana y los intentos de Estados Unidos de desalojar del poder al presidente Nicolás Maduro.
Rusia, Cuba, China, Turquía, Nicaragua y Bolivia sostienen su apoyo a Maduro, mientras otros 50 países liderados liderados por Estados Unidos le consideran un "usurpador" del poder y respaldan a Juan Guaidó, quien se proclamó en la jefatura de Estado por encargo de la Asamblea Nacional, dominada por el antichavismo.