Así lo asegura Hugo Alconada Mon en diario La Nación.
EEUU impulsa confiscación de bienes derivados de la corrupción argentina
Luego de que trascendiera que el fallecido ex secretario privado del kirchnerismo Daniel Muñoz invirtió decenas de millones de dólares en Estados Unidos, el FBI decidió abrir lo que denomina una "pesquisa preliminar" destinada a confiscar activos a lo largo y ancho de su territorio.
El dato lo publica este domingo diario La Nación a través de una columna de Hugo Alconada Mon, quien recuerda que el presunto testaferro de la familia Kirchner maniobró a través de una operatoria de lavado "que incluyó sociedades offshore de varios paraísos fiscales que se utilizaron para comprar inmuebles en Florida, que alcanzó luego a Nueva York y que pudo haberse extendido a otras ciudades".
De acuerdo al mismo matutino, "la investigación quedó en manos de funcionarios del Departamento de Justicia y agentes del FBI que integran la llamada Sección de Lavado de Dinero y Recupero de Activos (Mlars, por sus siglas en inglés) y que empujan un "proyecto" de nombre singular: la llamada Iniciativa de Recupero de Activos de la Cleptocracia".
El impulso de la maniobra del FBI provocó todo un despliegue de investigadores en varios puntos de Estados Unidos durante los últimos meses, según reconstruyó La Nación, "como también en la Argentina, adonde al menos un agente del FBI viajó para obtener datos y reunirse con funcionarios del Poder Ejecutivo, a mediados del mes pasado".
"Ese agente, Jared Randall, pasó por Buenos Aires, donde se reunió con funcionarios de la Unidad de Información Financiera (UIF) y de los ministerios nacionales de Justicia y de Seguridad, a los que preguntó sobre Muñoz y el entramado de personas y sociedades que comenzó a salir a la luz con la difusión de los Panama Papers, en abril de 2016", amplía La Nación.
De acuerdo a ese matutino, Randall también habría requerido información precisa sobre otras derivaciones de los "cuadernos de la corrupción", sobre las empresas involucradas y los empresarios, exfuncionarios y financistas que se acogieron al régimen de "imputados colaboradores", es decir, como "arrepentidos".