El hecho ocurrió en Corrientes: por pedido de la familia le realizaron un ADN a un joven mendocino y se conocieron los resultados.
La historia del niño secuestrado en 1993 que involucra a Mendoza
La justicia de la localidad correntina de Goya reveló que el estudio de ADN a un joven mendocino determinó que no corresponde a Carlitos González, el pequeño que fue secuestrado en Corrientes hace 25 años.
Tras la confirmación, su padre dijo este jueves a Télam que "la noticia me tiró por el suelo".
En 2016, el hombre había solicitado a la fiscalía de esa ciudad correntina que investigara la identidad de un joven que reside en Mendoza, hallado en redes sociales, con un gran parecido a su hijo.
El fiscal de instrucción Patricio Palisá dio curso a la investigación, pero finalmente el estudio de ADN descartó que se trate del hijo de González.
Los sobres con los resultados se abrieron este miércoles delante de González, la madre de "Carlitos", Norma Saetone, y la hermana Martha Pelloni, titular de la Red Infancia Robada.
"Todos lo veían muy parecido a Carlitos, la gente me lo decía", contó González sobre las fotos del joven que sus familiares encontraron en Facebook. También "tiene 27 años, la misma edad que mi hijo tendría hoy".
Sobre la búsqueda, el padre del niño desaparecido afirmó que "la causa sigue abierta. Yo seguiré investigando, como lo vengo haciendo hace 25 años, desde el 93, cuando se los llevaron".
"No me voy a quedar, yo tenía 26 años cuando todo pasó y ahora tengo 51, tuve un ACV y una operación de columna, pero voy a seguir buscando a mi hijo", afirmó González a Télam.
Por su parte, el fiscal Palisá, tras detallar este jueves que "el estudio fue un procedimiento absolutamente limpio y confiable", dijo a Radio Dos que "voy a seguir adelante", y que "esto" (por el resultado negativo del ADN) "no me tira para atrás".
Carlitos González fue secuestrado en 1993 en una fiesta de cumpleaños en la zona rural de la localidad de Lavalle, a 210 kilómetros de la capital de Corrientes. Su desaparición motivó movilizaciones encabezadas por sus padres y la hermana Pelloni, y el caso tuvo repercusión nacional.
El pequeño de dos años fue buscado infructuosamente en la Argentina, en Paraguay y Brasil.