Desde diciembre se construye una torre en pleno Paseo Sarmiento. Un edificio de 8 pisos crece en pleno microcentro.
Nos cayó de punta: historia del edificio legislativo en la Peatonal mendocina
Entre Peltier 351 y Sarmiento 251 hay 13 minutos de distancia para un ciudadano que quiera trasladarse caminando entre Casa de Gobierno y la Legislatura, por calle Patricias Mendocinas en dirección sur-norte.
No debería ser así, si nos atenemos a la historia mendocina de la obra pública cuando en los proyectos del Plan Regulador para Mendoza en 1941 contemplaban los edificios de los tres poderes del Estado en el predio del Barrio Cívico a 1,1 kilómetros al sur de la sede parlamentaria.
Eva Duarte junto a la maqueta del Palacio de Gobierno Provincial
"El 12 de junio de 1948 se publicó el proyecto del 'Centro de Gobierno de Mendoza', una urbanización destinada a contener diversos edificios de las administraciones públicas provincial y nacional. Parte de lo previsto se edificó pero el resto quedó inconcluso, yuxtaponiéndose luego otras ideas, proyectos y realizaciones", explica el blog Barrio Cívico de Mendoza.
Además del congreso mendocino, nunca se hicieron las sedes del Archivo de la Provincia y la residencia del Gobernador.
Dice el adagio que "hay que conocer el pasado para entender el presente". Y nunca más adecuado para la intención de esta crónica.
Que la Legislatura haya ocupado una casona donde allí funcionó el Club Social y nunca haya tenido una sede genuina como poder del Estado habla muy mal de los mendocinos o por lo menos de quienes pudieron, y no lo hicieron.
Se podría interpretar entonces que la Legislatura es el Poder del Estado más olvidado y por ende el más menospreciado y consecuentemente el más vilipendiado.
También se podría pensar en cuánto estamos dispuestos a acatar las leyes que allí se aprueban si desdeñamos a quienes las discuten y la redactan. Esta última observación atañe también al respeto que los otros dos poderes, el Ejecutivo sobre todo, tienen por el Legislativo.
No es un misil, es un edificio
En términos reales desde diciembre de 2017 la Legislatura se hace "ver" no por las leyes que allí se sancionan sino por la decisión de ocupar el terreno de 400 metros cuadrados que quedó baldío durante diez años después que la Municipalidad de Capital ordenara la demolición de ese sector del edificio por el riesgo de derrumbe.
Hoy nos encontramos con la cuadra de la Peatonal entre Patricias Mendocinas y España bloqueada por una gran obra pública. Un edificio que se va levantando raudamente entre los demás y llegará hasta la altura de 25 metros y con una profundidad de otros 14.
Semejante estructura se ha ido levantando y con el consecuente impacto urbano y ambiental para vecinos y comerciantes.
Los colaboradores de la vicegobernadora Laura Montero reconocen esa incomodidad y tratan de generar acciones amistosas con el circundante ambiente abarrotado como la muestra fotográfica callejera sobre los periodistas legislativos de Raúl Zalazar.
Desde lo legal, la edificación tiene los papeles al día en cuanto a la habilitación del impacto ambiental otorgado por el Municipio.
Tiene un costo de 146,9 millones de pesos y Monteverdi, la empresa adjudicataria, asumió el compromiso de terminarlo en 600 días. Es decir, para agosto del año que viene debería estar terminado.
¿Por qué se decidió construir el nuevo anexo de la Legislatura que contendrá a unas 250 personas (entre senadores y personal legislativo) diariamente?
Como muchas de las grandes definiciones de este país se tomó por un hecho trágico, para la Cultura de Mendoza en este caso, como lo fue el incendió del edificio del ECA (Espacio Contemporáneo Moderno) en Gutiérrez y 9 de Julio en enero de 2017.
Allí, en ese antiguo edificio construido para el recordado Banco de Mendoza, funcionan todavía despachos de senadores y se realizan las audiencias públicas del Senado.
El Senado ocupó esas dependencias después de que el banco se desguazó a causa de los desmanejos financieros de la gestión privada entre 1996 y 1999 en manos del no tan bien recordado Raúl Moneta.
Aquel fuego que se consumió buena parte de la cúpula del edificio puso en alerta a la vicegobernadora Laura Montero.
La vicegobernadora Laura Montero.
El personal legislativo y los mismos parlamentarios pudieron quedar en peligro entrampados en los recovecos del edificio aquel día.
Así lo explicó esta semana al Post el secretario administrativo de la Legislatura Leonardo González Luque. El funcionario se preocupó por ponderar la reingienería aplicada para poder financiar la obra en cuestión desde que asumió Montero.
Esto explicó: se ahorraron 80 millones de pesos en el primer año de gestión "gracias a la mejora en la eficiencia del gasto lo que hizo reducirlo en un 30 por ciento".
Preocupados en manifestar esto los funcionarios de Montero reafirman que el edificio nuevo es producto de la eficiencia.
Y la segunda medida fue "el acuerdo entre los legisladores de transferir partidas dedicadas para servicios y contratos para uso de capital que fueron 25 millones de pesos más".
Cómo es la nave de cemento
Desde el costado edilicio es evidente que será una torre que irrumpirá en las alturas del microcentro.
En los primeros dos niveles contendrá un auditorioen el primer subsuelo con entrada a nivel de la calle Sarmiento y más profundo habrá subsuelo para el recinto de cómputos.
Ya por encima, habrá una sala "flexible" para las comisiones legislativas y en el siguiente nivel ascendentes los despachos de las presidencias de Diputados y el Senado.
A partir de ahí hasta el octavo nivel se ubicarán los despachos de los legisladores y sus respectivos asesores.
El signo de época lo aportó el ingeniero responsable de la obra Mauricio Garay quien rápido de reflejos y con su smarthphone en la mano mostraba al Post con imágenes tridemensionales cómo serían las futuras instalaciones.
En ese tren, el profesional remarcó la faz sustentable del proyecto. El edificio tendrá paneles solares para dotar de energía a toda la estructura. "Ese equipamiento generará 30 kilowatts equivalente a lo que consumen cuatro viviendas", detalló.
A esta altura, a 10 meses del inicio de la obra, se ha concretado el 26 por ciento del proyecto y señalan que los plazos de ejecución son cumplidos.
Queda claro que el anexo legislativo en construcción es una obra pública basado en la urgencia más que en la planificación y que ese espacio estrecho donde se levanta la torre es porque la vieja estructura de la casona edificada en 1889 (el año que viene cumplirá 130 años) no soportó más los sacudones telúricos.
Todo un símbolo de una época. La Legislatura funciona allí desde 1909.
Sólo en 1987 surgió la idea de retomar el proyecto del Barrio Cívico. Durante la gobernación del peronista José Bordón el diputado también peronista Jorge Coco López que presidía la Cámara de Diputados tuvo la idea de adherir a un programa de crédito internacional para países que retornaban a la democracia.
A la izquierda, el predio que estaba destinado para la Legislatura en el Barrio Cívico.
Todo se diluyó por lo caro del préstamo recuerdan quienes presenciaron esas reuniones.
Con todo esto los senadores parecen los hijos grandes que no tienen techo propio, entonces el Estado les hizo lugar para se construyan un sofisticado departamento al fondo de la casa.
El entonces presidente Juan Perón comentando la maqueta del Proyecto junto al Arquitecto Blanco.
Qué pensaría el arquitecto Alberto Belgrano Blanco cuando en 1948 presentó su plan del Barrio Cívico para tener una ciudad más ordenada y habitable, los mismos que hoy hacen este edificio coinciden en esta observación.
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