El israelí de 36 años dejó que le tomaran fotos en el lugar donde había enterrado a su mamá y a su tía, luego de asesinarlas.
Pirhya Sarussi (63) se resistió al ataque del asesino. Su hijo está preso por el crimen. Ya muerta, le introdujo un hierro en la vagina y otro en el ano y la enterró.
El móvil de los asesinatos sería las deudas del israelí con sus acreedores. Los detalles sobre cómo las asesinó y las enterró son macabros.
El hijo de una de las israelíes desaparecidas en Mendoza posee un coeficiente intelectual muy alto, tiene respuestas para todo, no se equivoca, no miente y solo muestra angustia por los gatos.
El hijo de una de las dos mujeres desaparecidas en Mendoza, de 36 años, fue la última persona que vio a su madre y a su tía. Escabrosos detalles del allanamiento, y algunas sospechas.