Este domingo no hubo gala de eliminación, porque se realizó el repechaje que permitió el regreso de tres participantes. Además se dio el primer adelanto sobre el "golden ticket".
Apenas terminó el festejo, comenzó el juego de congelados, además de Marisol, ingresó la hermana de Furia y la madre de Zoe que generó polémica.
El día de recibir la noticia de expulsión, real para los jugadores y falsa para los televidentes, coincidió con el de la prueba para ganar una vivienda. Todo fue asombro, especulación y cansancio.
La salida fue para Lucía, la salteña que formaba parte del trío de "las superpoderosas". Ahora podrá competir para volver a ingresar con el resto de los eliminados.
Los exparticipantes de Gran Hermano se cruzaron en una pelea en el programa de Georgina Barbarossa. Y terminaron a los gritos.
Con la líder empecinada en eliminar a Juliana, la placa quedó integrada por la mayoría de los jugadores del reality. Este martes uno será salvado y otro subido a placa.
Además, la líder tendrá que poner a otro jugador en la placa para esta novena gala de eliminación.
A minutos del ingreso de Romina Uhrig para ayudarlos a organizarse, Juliana obtuvo la posibilidad de no ser nominada esta semana.
En medio de una casa prendida fuego, el líder hizo una jugada que el espectador esperaba, pero los jugadores no.
Minutos antes de que comenzara la gala de nominación uno de los jugadores, Federico, alias Manzana, se paró frente a todos y cambió el juego.
Con una placa de 13 nominados, el público deberá decidir de manera positiva, quién queda y quién sale de la casa.
Esta noche se resuelve el misterio de la misión que el Big les dio a la comediante y a Furia, para ganar premios especiales.