En la madrugada de este martes, robaron un listón de bronce del piso en el ingreso a un edificio; anteriormente le habían sustraído las argollas y hasta la tapa del portero eléctrico. En la zona, varios edificios son blancos de robo de bronce.
Tras escapar, el ladrón se metió adentro de una casa y se escondió debajo de una cama. Un robo igual se había producido el lunes en la Plaza Independencia.
En distintos barrios se registran hurtos en frentes y jardines. La gente no denuncia pero se queja. Otros, guardan sus canillas de metal y las reemplazan por plásticas.