La Fiscalía de Bolivia también emitió una orden de detención contra varios de sus ministros por sedición y terrorismo.
La presidenta interina saliente, Jeanine Áñez decidió que no invitaria a la ceremonia de asunción ni al expresidente ni al líder del régimen chavista venezolano.
Alrededor de 300 personas se manifestaron solicitando al Gobierno provincial las condiciones edilicias para poder emitir los sufragios.
Áñez atacó a Evo Morales durante un acto público al pedir que "no vuelva este tirano".