En su cuenta se presenta como empleado de prensa del ministerio de deportes (en realidad subsecretaría) de Mendoza. Le envió a una usuaria un mensaje misógino, insultante y chabacano.
Suspenden a un empleado público mendocino por agredir en Twitter
El Estado provincial sancionó a un empleado público por su mala conducta al responder de manera humillante en Twitter, adonde se presenta como empleado de prensa del Ministerio de Deportes de Mendoza.
El sumario administrativo se inició en agosto del año pasado contra Oscar Miguele, quien, luego de que una usuaria hiciera un comentario contra la cuarentena, le envió un mensaje lleno de insultos y luego la bloqueó.
Carolina, la usuaria en cuestión, tuiteó la captura del mensaje que, por privado y de manera cobarde le envió Miguele, y etiquetó al gobernador Rodoldo Suarez. Además, etiquetó a varios periodistas y medios de Mendoza y de CABA, lo que hizo que las autoridades del gobierno de Mendoza se enteraran pronto de las palabras del empleado de prensa.
Miguele ya había tenido quejas por su trato en ocasiones misógino de algunas compañeras de trabajos anteriores y, por eso, el sumario administrativo continúa. Sin embargo, por el lenguaje utilizado en ese mensaje en particular, le aplicaron tres días de suspensión.
El subsecretario de Deportes, Federico Chiapetta fue uno de los primeros en comunicarse con Carolina. Principalmente, para pedirle disculpas en nombre de su repartición, pero también para pedirle su testimonio para hacer el trámite adminsitrativo correspondiente.
La falta figura como tal en el Estatuto del Empleado Público, una ley que en la mayoría de los casos sirve para defender los privilegios de los empleados públicos pero que, esta vez, sirvió para suspender a Miguele al recordar cuáles son las responsabilidades que les toca. No todos son derechos.
En el artículo 13, el decreto Ley 560/73 que regula el empleo público, establece que: el personal está obligado a: a) La prestación personal del servicio, con eficiencia, capacidad y diligencia, en el lugar, condiciones de tiempo y forma, que determinen las disposiciones reglamentarias correspondientes; b) Observar, en el servicio y fuera de él, una conducta decorosa y digna de la consideración y de la confianza que su estado oficial exige; c) Conducirse con tacto y cortesía en sus relaciones de servicio con el público, conducta que deberá observar asimismo respecto de sus superiores, compañeros y subordinados.
Precisamente por la falta a los incisos b y c es que se le aplicó esa sanción a Miguele, que constituye, a su vez, la primera vez que el comportamiento en redes sociales provocara una investigación y sanción a un empleado público mendocino.
Según explicaron desde la subsecretaría de Deportes, "aunque se trate de una red individual a su nombre, al presentarse como empleado público, debe cumplir con lo estipulado en la Ley".
Por su parte, Miguele no pidió disculpas ni hizo comentario alguno a sus palabras, pero dejó de usar Twitter en septiembre del año pasado y recién en febrero volvió a utilizar la red social. Sigue presentándose como "perodista deportivo prensa del ministerio de deportes de Mendoza"