Suicidio del soldado: "Le decían negro de mierda" según la familia

 El martes 4 de octubre, Paolo Alexander Pino Quintero, de 19 años , que era voluntario en el Ejército, se suicidó en su casa luego de salir del Regimiento de Infantería de Montaña (RIM) N° 11 de Tupungato.

La familia entiende que el chico tomó la decisión por las humillaciones, vejaciones y torturas a las que habría sido sometido diariamente en esa sede militar y que el joven les había relatado.

El abogado de la familia, Daniel Álvarez dijo en el programa Te digo lo que pienso que conduce Ricardo Montacuto por radio Nihuil que el chico era humillado constantemente por su aspecto físico. 

Ver: Un soldado de Tupungato se suicidó por maltrato del Ejército, según su familia

"Vamos a contarle a la sociedad lo que sucedió porque esto no puede suceder más. Era un niño de 19 años que fue atormentado sistemáticamente dentro del RIM 11 de Tupungato. Se burlaban de su aspecto físico con calificativos peyorativos, además de otras prácticas que, según ellos, era para forjar el carácter. Por ejemplo, lo hacían transportar una piedra de casi 60 kilos. Una situación que él había naturalizado a tal punto que le había puesto nombre. Decía que iba con Rocky para acá y para allá. Es impresionante todo lo que padeció esta criatura".

Además, Álvarez dijo que la mamá de Paolo le contó que su hijo le decía que le hacían llevar el plato de comida saltando en una pierna y si se le caía, tenía que comer del piso. "También me dijo que lo hacían dormir en las duchas. No lo dejaban ir a dormir a su cama. Espantoso".

"La verdad es que me he involucrado mucho en este caso. Aclaro que soy egresado del Liceo Militar General Espejo. Mi padre fue un militar retirado. Es decir que conozco al ejército desde las entrañas y sé que este tipo de cosas suceden. Creo que hay que ponerle un punto final. Así como con el caso Carrasco terminó el servicio militar obligatorio, con este caso tienen que terminar los abusos".  

También señaló que Paolo llevaba un par de meses en el ejército. "Al parecer, se le puso entre ceja y ceja a unos muchachos jóvenes como él que no están capacitados para el mando. Y menos aún para el mando sobre una persona. Estoy de acuerdo con que se le imparta instrucción militar y que se le haga pasar la pista de combate, pero eso no equivale a que puedan denigrar a una persona.

"Le decían boliviano orejudo. Negro de mierda. Vamos a hacer que te vayas de baja, etc.... Eso no es forjar el carácter, eso es humillar, discriminar", afirmó.

Mensajes de Paolo a su madre

Respecto a las comunicaciones que el chico que mantenía con su mamá y también con una tía, el bogado explicó que "le contaba sobre las cosas que iban pasando día a día. Por eso, habría uno o varios testigos de lo que sucedía. Me voy a reunir con la familia y vamos a armar todo el plexo probatorio. Esta necropsia psicológica que necesitamos hacer para el lunes presentar la querella", señaló.

"Escuchando los audios del pibe, a mí se me estrujaba el corazón. Al principio hablaba con tanto entusiasmo los primeros días. Le decía a su mamá: mamí, mañana nos van a enseñar a tirar con el Fal y después fue todo depresión, presiones, miedo y angustia. Decía: quieren que me vaya. Me dicen que no sirvo, etc... " 

El letrado detalló que en un franco, "que se lo dieron de lástima porque lo dejaba permanente privado de salir, él toma la decisión drástica de quitarse la vida. Cuando los padres llegan a su casa se encuentran con ese espectáculo dantesco de ver a su hijo colgado".

Por último dijo que hay que investigar la instigación al suicidio en primer lugar. "Porque no hace falta que te den un arma y te digan matate. Basta con que haya acciones sistemáticas que uno sabe,  pueden llegar a tener una consecuencia como la que tomó Paolo. Un niño de 19 años". 

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