El refugio que les da una segunda oportunidad a perritos que fueron abandonados abre su casa para festejar el aniversario. La encargada contó la historia del lugar, que necesita donaciones para que los animales puedan afrontar el frío.
Diez años cuidando perros mayores: la historia del hogar "Ángeles de 4 Patas"
El refugio para perros ancianos Ángeles de Cuatro Patas cumple 10 años este domingo 4 de junio y lo celebra en su sede. Allí se atienden 184 animales, la gran mayoría de ellos adultos mayores, que con los achaques de la edad pueden vivir vidas felices gracias al trabajo de Beatriz Méndez, encargada del lugar, y del resto de personas que allí colabora.
Detrás de cada perro hay historias de abandono, maltrato y enfermedades. Pero la segunda oportunidad que reciben en el refugio les da la posibilidad de vivir una última etapa feliz y con amor.
Beatriz Méndez, encargada del hogar.
Para celebrar la fecha, Ángeles de Cuatro Patas recibe este domingo a partir del mediodía a todos los mendocinos que quieran llegar hasta allí. Habrá un paseo didáctico por el lugar y quienes vayan podrán conocer a los perritos que allí residen. El hogar está ubicado detrás del barrio Esperanza III (Godoy Cruz) al pie de la cordillera.
"Muchas personas no quieren adoptar perritos viejitos por el hecho de que se van a morir, por las enfermedades, porque creen que es un problema". Por eso que cuenta, Beatriz decidió dedicar su vida a cuidar perros de edad avanzada.
Fermin, uno de los 184 perros que viven actualmente en Ángeles de Cuatro Patas.
"Yo llegué al refugio porque fui a un escracho a una persona que le había echado ácido a un perrito. Ahí conocí a Mabel (quien era la encargada), que me invitó ", relató Beatriz al POST. Ella ingresó al viejo hogar como voluntaria y por iniciativa suya, el refugio se mudó a su actual ubicación en junio de 2013, hace diez años. La mujer quedó a cargo desde entonces.
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Hay pocos hogares del estilo de Ángeles de Cuatro Patas. Así lo contó Beatriz: "Cuando empezamos sí teníamos cachorros, teníamos de todo. Pero una vez encontré a una perrita muy viejita a la que habían tirado en el medio de la nada. Y ahí empecé a ver que la mayoría de los refugios se encargan de perros más jóvenes y no hay refugios que se encarguen de los viejitos".
Conseguir los recursos para mantener a tamaña cantidad de perros no es sencillo. El refugio se financia con la plata de Beatriz y las demás personas que van fijas y de los voluntarios, que van solo los domingos. También con donaciones y con la ayuda de las "madrinas". Son personas que se encargan de un perrito en particular: lo van a visitar cada cierto tiempo y les llevan comida.
Quienes no pueden adoptar a los perros los visitan periódicamente y les llevan alimento.
"Las adopciones nos cuestan muchísimo porque al ser perros adultos, muchas personas no quieren adoptar perritos viejitos, por el hecho de que se van a morir, por las enfermedades, porque creen que un perrito ciego es un problema. Y la verdad es que el perrito ciego no es ningún problema, se manejan muy bien", aseguró Beatriz.
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Acompañar a un perrito en sus últimos años de vida implica también tener que lidiar con la muerte de forma muy frecuente: "Cada dos o tres mese se le hacen análisis a los más viejitos para ver su estado de salud. Cuando muere un perrito, nosotros tenemos un lugar cerquita, en el mismo refugio, donde los enterramos, y así están cerquita de nosotros también".
Cómo llegar al refugio y cómo ayudar
Este domingo las puertas del refugio abren desde el mediodía. El lugar se ubica detrás del barrio Esperanza III, en el piedemonte de Godoy Cruz. Para llegar al lugar, los interesados deben contactarse directamente con los encargados. Quienes quieran ir pueden llamar al número 261 545 3574. También pueden comunicarse al 261 756 4533.
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Entre las distintas necesidades que tiene el lugar, la urgente es mano de obra voluntaria para poder renovar la zona más antigua del refugio.
Los perros tienen su lugar asignado con su nombre en el refugio.
Asimismo, quienes quieran hacer su aporte para los gastos del refugio pueden realizar su donación a la cuenta bancaria del mismo con el alias CONGO.DIARIO.SAL. También a traves de su CBU 0110285930028519396347o, o comunicándose al 261 756 4533. El dinero es muy necesario especialmente para disminuir la deuda que el refugio mantiene con la veterinaria que atiende a los perros.
También se reciben materiales como tierra para relleno, granza, ripio, pallets, palos, tela romboidal, ladrillos, cemento y árboles como álamos y acacias, ya que no hay sombra en el refugio.
Cada dos o tres meses, a los perros más viejos se les realizan controles veterinarios. El refugio necesita donaciones para cubrir las deudas con la veterinaria.
Los demás elementos que el refugio necesita son abrigo para los animales y alimento. Y siempre se recibe a personas responsables que quieran adoptar a alguno de los perros mayores que reside en el refugio.
La página del refugio en Facebook puede visitarse en este enlace. En Instagram también tienen una cuenta y puede visitarse siguiendo este link.
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