Son cerca de 43 "exnumerarias", que debían hacer tareas domésticas no fueron remuneradas. Desde la organización ultra católica aseguraron que sí les pagaron por el servicio.
Denuncian al Opus Dei por no pagarles a las empleadas domésticas
Casi 50 mujeres acusan a la organización Opus Dei de hacerlas trabajar como empleadas domésticas totalmente gratis. La Nación entrevistó a Catalina María Donnelly, directora de la rama femenina en Buenos Aires del Opus Dei, para aclarar la denuncia.
Se trata de 43 "exnumerarias auxiliares", una de las categorías de pertenencia a la Obra, con orientación en trabajo de servicio, y dicen que fueron reclutadas cuando eran adolescentes con la promesa de continuar su educación, pero que la instrucción fue en tareas domésticas.
Si bien todavía no presentaron una demanda formal, el abogado que las patrocina, Sebastián Sal, acusa al Opus Dei de trabajo no remunerado en la limpieza y la cocina de los centros de la Obra durante su instrucción y también en los años posteriores. Sal espera llegar a un arreglo extrajudicial.
Las mujeres aprendían "Estudios Domésticos"
Las mujeres hoy tienen entre 40 y 60 años, y el período que denuncian de instrucción y trabajo no remunerado en el Opus Dei fue entre 1980 y principios de los 2000.
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Donnelly, por su parte, es numeraria, otra de las formas de pertenencia a la Obra, orientada a personas con carreras universitarias. Dice estar dolida por las acusaciones. "Yo en persona les quisiera pedir perdón de lo que han sufrido y cómo lo han vivido ellas. Me da mucha pena que con la edad que tienen no hayan podido resolver ese aspecto de su vida. No es la experiencia que tengo con otras (numerarias auxiliares) que también se han ido de la Obra."
Admite, sin embargo, una posible "informalidad" en la remuneración. "Quizás la que dirigía la residencia (donde vivían las exnumerarias auxiliares) hacía una caja común con todos los sueldos y de ahí se enfrentaban todos los gastos", explica.
El Instituto de Capacitación Integral en Estudios Domésticos (Icied), como se llamaba el colegio del Opus Dei cuando se fundó, en 1972, era una escuela de internadas ubicada en el predio más emblemático de la Obra, conocido como La Chacra, que queda en Bella Vista, en el noroeste del Gran Buenos Aires.
El Icied cerró en 2017, durante la gestión de Donnelly. "Nos pareció que ya no era adecuado a las circunstancias actuales de la mujer en la sociedad. Yo hubiese preferido cerrarlo antes", aclara.
Donnely aseguró que los trabajos siempre fueron remunerados pero destacó que "Lo que se hacía durante la cursada de las alumnas en el colegio no era trabajo; eran prácticas profesionales aprobadas por el Ministerio de Educación y fiscalizadas por los inspectores."
Catalina Donnely explicó que ellas no eran empleadas sino "familia"
Agregó que "Las numerarias auxiliares no son empleadas del Opus Dei, son EL Opus Dei, es su propia familia. Ahí puede ser que no haya habido prolijidad, pero cada centro tiene un presupuesto aprobado. Ahora que después la caja se llevara más a nivel familiar, como una caja común, puede ser. Hoy en día está mucho más ordenado. Todas tienen sus recibos de sueldo."
Fuente: La Nación
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