Así lo aseguró Alejandro Donadi, director de la Clínica de Cuyo. Asegura que el conflicto es complejo porque no hay interlocutores con los médicos ni las prepagas.
El conflicto médico hizo perder a una clínica de Mendoza el 50% de turnos
El conflicto entre las prepagas, los médicos y los afiliados/pacientes continúa sin solución a la vista. En el contexto de la crisis económica que vive el país, el problema se instaló cuando los profesionales de la salud decidieron cobrar la consulta médica a los pacientes, emitirles una factura y que luego la obra social se la reintegre. Al respecto, argumentan que de otro modo tienen mucha demora para que les liquiden el servicio prestado. Con esta modalidad, la persona que va al médico tiene que pensar en abonar 6 mil, 7 mil pesos o más en la consulta, además de la cuota de su cobertura médica, y luego esperar el reembolso.
Alejandro Donadi es médico y director de la Cínica de Cuyo. En diálogo con Ricardo Montacuto en el programa Te Digo lo que Pienso que se emite por Radio Nihuil, dio detalles de la situación que están atravesando.
Al ser consultado sobre el panorama actual y el avance hacia una eventual solución, dijo: " Es incierto porque tanto las prepagas como las obras sociales que han entrado en conflicto dejan a las instituciones en medio de un fuego amigo. Las clínicas estamos atendiendo, no hemos entrando en conflicto con las obras sociales pero si las atenciones medicas que trabajan en los consultorios de todas las instituciones. Cerca del 80% de las instituciones ambulatorias están trabajando bajo la misma situación; el médico cobra la consulta ética mínima".
Y agregó: "El resto de las atenciones que no dependen de la consulta, como guardias, etc, nosotros estamos recibiendo la obra social y no se está cobrando ningún copago ni coseguro".
Respecto a la totalidad de profesionales que trabajan en la clínica y aquellos adeptos a esta medida dijo: "El total de nuestra planta es entre 300 y 320 profesionales y más del 90% están trabajando con esta modalidad".
"En el caso de la clínica se está trabajando con la consulta ética mínima de 6 mil pesos. Cómo no podemos cobrar esa consulta ni se puede emitir una factura porque romperíamos con los convenios vigentes con prepagas y obras sociales, es el mismo médico el que hace la factura en el consultorio o la envía a través de un correo elctrónico al paciente para que él haga el pedido de reintegro. Por el lado de la clínica no hay doble facturación", aclaró.
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Al ser consultado, sobre la mediación de las instituciones médicas entre los clientes y las prepagas, detalló: Las clínicas no tenemos poder de juego con los médicos porque ellos no son empleados de la institución y a su vez los financiadores, que son las prepagas, dicen que no tienen capacidad de incrementarles. Entonces las clínicas quedamos en una posición que es bastante difícil porque, si esto se prolonga en el tiempo, también vamos a entrar nosotros en una especie de espiral económico financiero problemático porque dejamos de recibir los porcentajes que renetemos de las obras sociales por las consultas, dejamos de prestar servicio y vamos a entrar en un default".
A cuánto a las posibles soluciones a este conflicto, Donadi fue enfático: "Por ahora vemos un horizonte difícil porque hemos llegado a arreglar con cinco, entre prepagas y obras sociales. El resto no nos han alcanzado ninguna propuesta en concreto. Tampoco hay un interlocutor claro por parte de los médicos. Es un conjunto de voluntades. Todo esto se ha generado sin un hilo conductor, no hay una persona de referencia con la que tratar, es un conjunto de voluntades que han decidido hasta acá llegamos, entonoces no hay nada para negociar".
"Viendo la situación durante la semana y si la acatación sigue siendo tan alta, vamos entrar en una situación crítica. Se nos cayeron el 50% de los turnos en una semana", finalizó.
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