Un estudio realizado en Mendoza apunta que casi la mitad de los jóvenes gastó dinero en apuestas en alguna ocasión. El número solo se compara con el de los jubilados.
Casi la mitad de los jóvenes mendocinos muestran interés en las apuestas online
Poco más de 30 años pasaron desde que la OMS reconociera a la ludopatía como una enfermedad; fue durante 1992 cuando el organismo consideró a este fenómeno como un padecimiento que impacta en la salud mental, física, emocional de pacientes y familias que muchas veces no poseen los recursos económicos para enfrentar sus consecuencias
El fenómeno de las apuestas en línea se encuentra en la cresta de la ola. Cada vez son más los sitios en los que se puede a acceder a distintos tipos de modalidades y, asimismo, también son más los apostadores que se vuelcan a este nuevo mercado.
En ese marco, la consultora Demokratia elaboró un estudio en Mendoza sobre la injerencia y llegada de las apuestas. A raíz de esto publicó un documento que menciona a la ludopatía como una problemática creciente, especialmente en el contexto digital, donde las plataformas de apuestas online han proliferado, facilitando el acceso a todo tipo de públicos, incluidos menores de edad.
Ante este panorama, se subraya cómo la falta de controles efectivos y la constante promoción en medios masivos generan un entorno propicio para que esta adicción se propague. Desde Demokratia argumentan que prohibir o restringir el acceso a las apuestas no es suficiente. El documento propone una estrategia que combine educación, visibilización de los riesgos, y una mayor intervención del Estado y la sociedad civil.
Las apuestas llegaron a las escuelas y la DGE ya elaboró protocolos de actuación.
En cuanto a las cifras, el estudio incluye datos de una encuesta que revela que el 66,52% de los encuestados no gasta dinero en apuestas, pero un 0,32% ha tenido que pedir prestado para cubrir deudas relacionadas con el juego, cifra que aumenta en la juventud.
Asimismo, un 3,99% suele gastar más de lo que puede permitirse, lo que refleja el impacto económico negativo que puede generar esta adicción. Además, la mayoría de los jugadores que gastan dinero en apuestas está entre los 16 y 30 años, evidenciando una mayor prevalencia del juego en la juventud.
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Otro aspecto destacado es el análisis de búsquedas en Google. Mientras que términos como "Boca" o "Dólar" dominan las consultas, la palabra "Ludopatía" aparece en un nivel muy inferior, reflejando la poca visibilización del tema en comparación con el interés por las apuestas y temas económicos. Incluso dentro de los medios de comunicación, se publicaron 63 noticias sobre apuestas entre el 4 y el 11 de septiembre de 2024, mientras que solo seis trataron sobre ludopatía.
Por último, el estudio pone en evidencia la influencia de las aplicaciones de apuestas, con plataformas como Bet365, Betsson, y Betano, que no solo ofrecen incentivos atractivos como bonos de bienvenida, sino que también han logrado obtener calificaciones altas por parte de los usuarios. Esto demuestra cómo el sector de las apuestas online se ha adaptado a las exigencias del mercado, convirtiéndose en una amenaza constante para la lucha contra la ludopatía.
Las apuestas deportivas dominan el sector.
El crecimiento de las apuestas en la juventud
Comparada con otros sectores, la franja entre los 16 y los 30 años parece ser una de las más afectadas por el tema en cuestión. Ante la pregunta "si tuviera que definir su relación con los juegos de azar ¿cuánto le interesa el juego?".
Los jóvenes de 16 a 30 se encuentran segundos con un 56,45% de encuestados que aseguraron que les interesa el juego. Solo superados por las personas de más de 65 años. Mientras que en la categoría de "gasto dinero en apuestas", un 43.07% de los encuestados jóvenes aseguraron hacerlo. Nuevamente, solo superados por las personas de más de 65 años.
Dentro de la franja etaria de los jóvenes de 16 a 30, un 43,55% asegura nunca haber jugado. Mientras que dentro del resto que sí lo hizo: un 29,17% asegura haber apostado en el último mes, un 17,79% no recuerdan cuando apostó por última vez y un 9,49% aseguró que le gusta apostar en varias ocasiones.
En cuanto al dinero gastado, fuera del 56,93% que asegura no apostar, el otro margen muestra distintas realidades: un 27,93% asegura que gasta solo el dinero planificado; un 6,98% asegura que nunca ha visto perjudicada su economía por el juego; un 6,12% suele gastar más dinero del que puede dedicar al juego y un 0,91% ha tenido que pedir dinero prestado para cubrir deudas.
Finalmente, algunos de los fenómenos que se repiten están vinculados con la idea de que los jugadores se creen más listos que el sistema, cerca de un 40% optó por esa idea.
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