Se trata de Guillermo Kraisman, un funcionario municipal de Córdoba Capital que intentó robar mercadería en un súper y luego agredió a los policías que lo interceptaron.
Detuvieron en Córdoba a un funcionario por robar bondiola y jamón crudo
Un escándalo se vive en Córdoba, luego de que un empleado municipal fuera detenido por robar productos de un supermercado y agredir a efectivos policiales.
El protagonista del escándalo fue Guillermo Kraisman, quien actualmente desempeña el cargo de director general de Promoción de Clubes Sociales y Deportivos en la gestión de Daniel Passerini.
El incidente ocurrió en el supermercado Mariano Max, ubicado en la avenida Vélez Sarsfield, en el barrio Ampliación San Fernando de la ciudad de Córdoba. Según reportaron fuentes policiales, Kraisman intentó salir del supermercado sin pagar por varios productos, incluidos un blíster de bondiola, otro de jamón crudo, un pote de mermelada y un frasco de vidrio con cerezas.
Cuando los guardias de seguridad del establecimiento notaron la situación, dieron aviso a la policía, que rápidamente se hizo presente en el lugar. Al ser confrontado por los agentes, Kraisman no solo se negó a pagar la mercadería, sino que también reaccionó de manera violenta, arrojando el frasco de cerezas a los policías.
Los artículos robados por Kraisman.
Durante el altercado, el funcionario se identificó como empleado del Gobierno municipal, intentando utilizar su posición para evitar la detención.
Hasta el momento, el Palacio 6 de Julio, sede del Gobierno de la ciudad de Córdoba, no emitió ningún comunicado oficial ni tomó medidas en relación con el incidente protagonizado por Kraisman.
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Los antecedentes de Guillermo Kraisman
Según se conoció, el funcionario ya tenía antecedentes. El episodio generó una ola de críticas y pedidos de explicaciones, especialmente considerando el historial del funcionario.
Guillermo Kraisman tiene una larga trayectoria en la función pública, siempre ligado al Partido Justicialista (PJ) de Córdoba. Su historial incluye varios antecedentes penales, algunos de ellos remontándose a hace más de 20 años.
En 2006, por ejemplo, tuvo que renunciar a su cargo de concejal luego de ser suspendido por el cuerpo deliberativo debido a imputaciones por amenazas y lesiones leves. Años más tarde, fue denunciado por robo de energía eléctrica en el Club Avellaneda de Córdoba, institución que él preside y donde también enfrenta una causa por intento de soborno a un árbitro.
Guillermo Kraisman.
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