Una vecina encontró en una acequia, a unos 70 metros de la casa de la pareja detenida, la ropa interior y el arma blanca. Peritarán si tiene que ver con la adolescente desaparecida.
Caso Florencia Romano: encuentran un corpiño y un cuchillo
Encontraron un corpiño y un arma blanca en el interior de una bolsa en las cercanías de la casa de la pareja aprehendida por la desaparición de Florencia Agustina Romano (14).
Una vecina, de nombre María, halló la ropa interior y un cuchillo de unos 30 centímetros en una acequia, a unos 70 metros de la vivienda de Pablo Ramón Arancibia (33) y Micaela Méndez (27), ubicada en callejón Berra casi Padre Vázquez de Gutiérrez, Maipú.
A esta casa llegó Florencia el sábado al mediodía. Fue citada por Arancibia a través de Instagram. Él tenía como modalidad contactar adolescentes, ofrecerles dinero, tragos o regalos. La chica fue hasta su vivienda, las cámaras de seguridad tomaron el ingreso al inmueble pero no registraron la salida. Los investigadores también constataron que la tarjeta magnética de colectivo registró el viaje hasta esa zona de Maipú pero no la vuelta. En tanto que el teléfono de Florencia tuvo actividad por la tarde del sábado y luego se apagó.
Fue el propio Pablo Arancibia quien le dijo a la Policía que Florencia Romano había estado en su casa, pero que se fue a las 19. Sin embargo, esto no fue tomado por las cámaras de seguridad.
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Por esa razón es que los perros especializados en buscar cadáveres en Investigaciones buscaron en la casa de la pareja detenida y en los alrededores. No encontraron nada concreto, solo se detuvo una de las canes en un pozo séptico.
Pero los pesquisas tienen dos pistas más. Una de ellas es la sangre encontrada en la suela de una ojota del hombre, la cual está siendo analizada por el laboratorio del Poder Judicial. La otra, es que Arancibia tenía rasguños en su cuerpo y dijo que fueron hechos por un gato.
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Este miércoles a las 20 se vence el plazo para que la fiscal Claudia Ríos mantenga detenida a la pareja sin acusarlas formalmente. Si no encuentran una prueba contundente y de peso para acusarlos, deberá dejar a Arancibia y Méndez en libertad.
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