El Gobierno argentino habló de un "pacto" para el buen uso y que se deje de intoxicar el espíritu de la democracia. Juan Belbis cuestionó la iniciativa.
Un especialista sostuvo que es autoritario querer controlar las redes sociales
El secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, anunció que el Consejo Económico y Social trabaja en "un pacto para el buen uso de las redes sociales", para que se deje de "intoxicar la democracia".
Sobre la idea del gobierno, habló en el programa Te digo lo que pienso que conduce Ricardo Montacuto por Radio Nihuil, el consultor en medios sociales Juan Belbis.
El especialista dijo que sintió escalofríos al escuchar a Béliz porque es "otra vez escuchar planteos que suenan tristemente disociados de lo posible. Mas en estos días, que venimos recordando momentos oscuros y tristes de nuestro país que tienen que ver con el autoritarismo y la imposibilidad de expresarse. Escuchar esto de la boca del secretario de asuntos estratégicos de nuestro país es preocupante".
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Belbis explicó que los ejemplos que hay en el mundo, sobre el control de las redes sociales de los ciuedadanos, tienen que ver con modelos autoritarios. Los casos más resonantes son Rusia y China, que juegan con ecosistemas muy distintos a los nuestros en términos de espacios de opinión.
"Estos países tienen ámbitos de redes sociales propias que responden a las corporaciones de esos estados, que no son los espacios donde estamos nosotros, que pueden ser Facebook, twitter o tik tok. Son espacios que se caracterizan por habilitar el discurso, aunque tienen medidas propias, que en general, hasta son discutidas por los países donde la libertad de expresión es uno de los principios fundantes de sus democracias", dijo.
Además, el consultor indicó que el ecosistema argentino es un espacio donde efectivamente hay intencionalidad, en algunos casos, de difuminar la conversación pública, incluyendo noticias falsas o fake news. "Eso es desinformación. Es cierto que hay grandes niveles de violencia, pero creo que es un reflejo de la sociedad. Estamos viviendo un momento en nuestro país que, sin dudas, es complejo y muchas veces las angustias, cada uno las expresa donde puede, y muchas veces son las redes sociales. Pero no podemos desentender esto como práctica democrática, más allá de que hay intencionalidad y que eso puede ser penado".
"En EEUU, Facebook y Twitter le bloquearon la cuenta al presidente Donald Trump , porque desde un lugar institucional estaba promoviendo odio y acciones violentas contra las propias instituciones que a él le tocaba conducir. Las plataformas tienen mecanismos implementados para ésto, para detectar a aquellos que ponen dinero detrás de este tipo de publicaciones".
"Lo que anunció el gobierno no está muy claro. No sé a qué se refiere. Creo que intenta llevar títulos de calma y termina haciendo lo contrario".
Por último, el profesional destacó que de acuerdo a un estudio de redes que realizó, "la negatividad se propaga mucho más rápido. Eso está claro. Además es cierto que algunos espacios políticos, frentes y hasta algunos gobiernos que tienen una intencionalidad marcada y que se puede llegar a detectar cuando se lee lo suficiente entre líneas. Creo que hay un tema de cultura democrática que debe arrancar por fomentar la libertad de expresión, por fomentar estos nuevos canales y no por querer mandar un manual de estilo sobre lo que está bien y lo que está mal. Como sociedad debemos hacer el ejercicio de saber dónde estamos volcando nuestras angustias y hasta dónde con eso estamos afectando o no el tejido democrático que nos sostiene", finalizó.
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