Según un informe del IERAL de la Fundación Mediterránea, los distintos cortes subieron en torno al 60% durante el mes. El rubro empujará además a la inflación que será de dos dígitos.
El aumento de la carne de agosto sería el mayor en 18 años
Un informe de IERAL, de la Fundación Mediterránea que preside Carlos Melconian, sostiene que el precio de la carne vacuna, en la República Argentina, ya habría llegado a los $3.100 por kilo, en la tercera semana de agosto (promediando el valor de 18 cortes), con una variación desde el arranque del mes del orden del 55-60%.
"Por efecto sustitución, es de esperar que las otras carnes y proteínas animales también hayan tenido aumentos significativos", indicó el informe de la consultora.
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Respecto a su impacto en el presupuesto familiar, el gasto medio en proteínas animales ronda el 8% del gasto total (en el promedio, incluyendo las 3 carnes, chacinados, huevos, hamburguesas procesadas, etc.). "Tomando este último porcentaje como referencia, y trabajando con un aumento de precios consumidor de este grupo de productos de entre el 40% y 50%, el aporte a la inflación de agosto podría estar en un rango de entre 3,2 y 4 puntos porcentuales", señaló el trabajo
Asimismo, advierte que si bien resta los datos de esta última semana del mes (que definirá si se mantiene o no el salto de precios), "es muy probable que en agosto 2023 se observe el mayor salto de precios (en términos reales) de la carne bovina de al menos los últimos 18 años (2005-2023) y por tanto el mayor aporte a la inflación de este producto en la medición de los organismos oficiales".
Carlos Melconian
¿Por qué subió el precio de la carne?
Una de las explicaciones de la suba en el precio de la carne vacuna para el consumidor final, es en gran aumento que sufiró el ganado en pie.
Entre la tercera semana de julio y la tercera semana de agosto, el precio del novillito en el Mercado de Cañuelas (ex Liniers) subió un 70%.
Según Mediterránea, "entre las hipótesis se encuentran un posible desequilibrio por cuestiones estacionales entre la oferta y demanda de animales con destino exportación, la necesidad de recomponer márgenes en los feedlots (afectados por Dólar Maíz y otros factores), y un past through (traspaso) muy completo y rápido de la devaluación post PASO a los precios de la hacienda por retracción y/o menor disponibilidad de animales, entre otras".
Ahora resta saber cómo pueden seguir el ritmo de precios de la hacienda y la carne, algo que dependerá de la respuesta de los consumidores, es decir, si valida los nuevos valores o, por el contrario, limita el consumo. Mientras que por el lado de los exportadores, hay que ver si los negocios siguen siendo rentables a los nuevos precios, con un tipo de cambio que se quedaría en los $350 hasta las elecciones generales de octubre.
"Respecto a esto último, cabe destacar que los precios en dólares de la hacienda local quedaron bastante por encima de los valores de la región (Brasil, Paraguay, Uruguay), lo que limita la competitividad de los exportadores y pone cierto techo a los valores para las próximas semanas", concluyó el informe de IERAL.
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